Cómo recuperar una silla
Hola a todos,
Después de unos cuantos días de parón por las vacaciones navideñas hoy vuelvo, para traeros una nueva entrada en la que os enseñaré cómo recuperar una silla.
En mi caso es una silla a la que le tenemos un cariño especial, puesto que era de la abuela de mi marido, está silla a parte de tener mucha historia, me ha dado mucho trabajo por culpa de mi perro, que se dedicó de jovencito a morder los travesaños, así que me ha tocado sustituir varios de ellos y enmasillar a conciencia.
La idea que he utilizado para recuperar esta silla, en este caso no es mía. Es una idea muy original que he adoptado de una alumna del taller de Restáuralo en Madrid y es que hace ya unos cuantos meses que publicaron en Instagram la fotografía de una silla similar, a la que le habían cambiado el asiento gracias a unos tejanos y la verdad es que la idea me gustó tanto, que me la apunté y así les informé al instante.
Siempre guardo los tejanos viejos por un “si acaso los aprovechamos” y la idea me vino de perlas!
Para recuperar esta silla he utilizado:
- Pistola de calor para decapar
- Decapante
- Espátula
- Masilla para madera
- listones redondos
- Cola de carpintero
- Pintura a la tiza blanca
- Tejanos viejos
- Grapadora y grapas
- Papel decorado (reutilizado de manteles individuales)
- Lija
- Insecticida carcoma
- Broca pala 6 mm
Primer paso: Examen
Lo primero que debemos hacer a la hora de recuperar una silla o cualquier mueble, es examinar bien la pieza para encontrar las heridas que tenga la madera, ya sean provocadas por xilófagos o por golpes.
También nos ocuparemos de localizar las imperfecciones o roturas que pueda tener y estudiaremos cómo repararlas o sustituirlas.
Una vez examinada la pieza, la desmontaremos para poder trabajar mejor.
Segundo paso: El decapado
Para retirar las capas de pintura añeja de esta silla, podemos hacerlo con la pistola de calor o con un producto decapante.
En caso de optar por la pistola de calor, una vez retirada la pintura daremos una pasada de lija a toda la silla para alisar bien la superficie.
Si nuestra elección ha sido un producto decapante lo aplicaremos con una paletina y lo dejaremos actuar siguiendo las indicaciones del fabricante.
Una vez retirado el decapante con una espátula, daremos disolvente a toda la pieza con la ayuda de un paño o una muñequilla de algodón, para acabar de retirar los restos de pintura o barniz que puedan quedar.
Tercer paso: la desinfección
Para recuperar la silla, si hemos observado orificios de carcoma, además utilizaremos un insecticida a tal efecto.
Con ayuda de la cánula que porta el espray, lo aplicaremos en todos los orificios hechos por los xilófagos. Para preservar aún más la madera, aplicaremos el producto también en brocha.
Una vez desinsectado, dejaremos la silla tapada con un plástico en cuarentena entre 24 y 48 horas.
Si la infección es muy grande conviene repetirlo en 15 días.
Una vez transcurrido el periodo de cuarentena, con masilla taparemos los orificios de la carcoma.
Si queréis ver otras maneras de retirar barniz o ceras podéis verlo en el este enlace
Cuarto paso: La reparación
Muchas veces cuando restauramos muebles, toca reparar roturas y desperfectos. Ya os enseñé en “La restauración de la mesita de Marta”, un ejemplo de cómo podíamos reparar una de las patas que estaban rotas.
En este caso para recuperar esta silla, se han tenido que reparar tres de los cuatro travesaños, que estaban mordidos. Para ello se han utilizado listones redondos de 6 mm.
Para retirar los anteriores listones averiados, estos se han cortado arras de pata y a continuación se ha vaciado el hueco donde van con una broca de pala de 6 mm.
Una vez cortados los listones a la medida necesaria, se pegan en los agujeros con la cola de carpintero y se monta la silla.
Sexto paso: La pintura y la decoración
Para recuperar esta silla y cambiar su deteriorado aspecto, daremos dos manos pintura a la tiza en color blanco, dando suave lijado entre cada una de las capas.
Una vez seca la pintura de la silla, para el respaldo se han reciclado los manteles individuales de un restaurante que me parecieron preciosos, pero podéis aprovechar cualquier papel decorado o de cualquier tipo que os guste.
Con el papel escogido, realizaremos un decoupage en las maderas del respaldo. Una vez pegados eliminamos el sobrante del papel con una lija y aplicamos una última mano de cola blanca sobre el papel, para protegerlo.
Si queréis ver más ideas de Decoupage podéis pasaros por alguna de las siguientes entradas: Decoupage con calor o Caja reciclada con decoupage y chalk paint
Para el asiento, cómo os comentaba, he tomado prestada la idea de una alumna de Restáuralo, qué hizo el asiento de su silla aprovechando unos viejos tejanos.
Para ello cortaremos unos tejanos en tiras de 12 cm de ancho. Las doblaremos por el revés y a lo largo, y pasaremos un pespunte con la máquina de coser. Una vez cosidas les daremos la vuelta y las plancharemos.
Para hacer el asiento graparemos las tiras por la parte inferior de la silla, haciendo un enrejado. Es importante hacer esta trama para que el asiento quede más firme.
Finalmente para rematar el trabajo y ser cuidadosos con nuestros vecinos, aplicaremos unas almohadillas en las patas, para que no hagan ruido