Vestido collage con pájaros

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Estamos de ESTRENO por partida… triple! ¿Por qué? Pues porque comenzamos un nuevo mes, finalizamos un nuevo vestido y te descubro el nuevo corte de pelo de Olivia. Posiblemente en la vida de una persona un corte de melena no suponga mucho, pero para una niña de 3 años que ha estado acompañada de su melena desde que nació, es un paso importante. Y no digamos para su madre, cuando tuvo que hacer frente a la decisión de dejar sus rizos en el suelo de la peluquería y ver reducida la melena de su hija a unas simples ondas más o menos ordenadas :(((

Dejando atrás estos episodios tan significativos en la vida de las mamás… lo siguiente es hablar del vestido. Porque el mes lo estrenamos con muy buen pie. Ayer fue un día de verano aquí por las Rías Baixas y quien no disfrutó de playa fue porque no quiso. Pues bien, hoy os traigo mis pinitos con un RETAL de no más de 30cm. Yo soy la que siempre se pasa por las webs online a echarle un vistazo a esos retales en forma de oferta de final de pieza. A veces pienso para qué necesitaré yo 20 ó 30 cm de tela, pero, pero, pero es que es tan bonita!!!! Así que venga, al carrito de la compra, y luego cuando llegue a casa seguro que estira y me puedo hacer un vestido de princesa con el.

Desafortunadamente esto no suele pasar. Mi retal pedido de maravillosos pájaros estampados a modo de collage sobre un fondo de grisalla quedó en lo que era: 30 cm de largo por 110 cm de ancho.

Era necesaria otra tela para el resto del vestido y ahí eché mano de mis batistas de colores. En esta ocasión la coordinada sería un fino tejido de algodón de color amarillo ¿pollo?. A partir de ahí, es cuando me exprimo la cabeza y repitiendo el tema, hago yo un collage con el vestido.

El estampado del retal obligaba a cortarlo en dirección contraria al hilo. Yo sólo quería un cuerpo lo suficientemente largo para que todos los pajaritos protagonistas estuviesen encerrados en el Delantero. Pero había que sacar el contorno necesario de pecho y contar también con las dos Espaldas… y 30cm no daban. La solución era dividir Delantero y Espalda en dos piezas, por muy desiguales que fuesen.

Me quedé con una tira siguiendo el patrón que correspondía a cada costado: dos para el Delantero y dos para las Espaldas. Simplemente había que buscar entre los restos de la tela y sacar esas cuatro partes con sus correspondientes márgenes de costura para completar cada pieza.

Complicado no fue, lo podeis ver vosotros mismos. Eso sí, ajustando al mínimo que la tela escaseaba. El cierre, como no podía ser de otra forma, se realizaría con una cremallera invisible en todo el alto de talle.

Y montado el cuerpo como en cualquier patrón al uso… sólo quedaba elegir un diseño acorde y diferente que destacase y diese valor a ese lienzo de pájaros en el delantero. Este es el resultado:

Como veis, la elección de la batista amarilla anaranjada fue perfecta como forro y como falda unida al cuerpo. Mediante tiras de diferentes anchos: 10cm, 15cm, 20cm y 25cm; y un único largo (el doble del contorno del cuerpo), realicé los cuatro volantes fruncidos y rematados mediante una fina puntilla de ondas cosida a mano. En la espalda, al final del cierre de cremallera, una lazada quedaba como complemento.