¿tienes una patata? te estampo una camiseta!
Siguiendo con mis experimentos y tratando de que no todo gire en torno al carvado de sellos, tenía yo ganas de probar a estampar con una patata, que había oído hablar bien… y no puede ser más guay 😉
Empecé con una camiseta para mí, seguí con una para Alicia y ahora Alfre está esperando la suya…
Os lo explico todito y con vídeo corta-patata incluido, que una seguidora de Instagram me lo pidió… va por ti!
Yo he elegido los colores amarillo, lavanda y verde Hauser.
Podéis marcar con unas tiras de washi tape o cualquier otra cinta la zona donde queréis estampar o incluso alguna guía, para que quede lo más centrado posible…
Yo vierto unas gotas de pintura en un vasito de yogur reutilizado y la aplico sobre la patata con pincel esponja, esto tiene algunas ventajas:
- con el pincel se aplica mejor la pintura sobre la patata, controlando muy bien la cantidad que quieres y retirando si te sobra.
- los vasitos actúan como una campana donde la pintura está protegida del aire, tarda más en secarse y puedes taparla con un trocito de film para conservarla durante un buen rato (hasta horas) si fuera necesario.
Empezamos aplicando pintura sobre la patata con la esponja, no hace falta demasiada, es bastante cubriente y cunde un montón…
Con cuidado, la posicionamos siguiendo la guía que hemos marcado:
En mi diseño cada triángulo se superpone al anterior, para que se note esa superposición decidí no «cargar» la esponja con demasiada pintura, para no perder un cierto grado de transparencia:
Voy a cambiar de color para meter en cada línea un detalle distinto; cada vez que cambio de color limpio la patata con agua o, más cómodo aún, con una toallita húmeda suave, y cojo otra esponja para no tener que estar aclarando a cada momento…
Con el lila incluyo un triángulo de este color en la línea de verdes, y empiezo otra línea de triángulos lilas, donde después intercalo uno amarillo…
… para después seguir con el lila…
Y así termino mi composición; por cierto, la patata lavada puede conservarse envuelta en papel film o de aluminio en la nevera, y aguanta en perfecto estado para estampar un par de días (yo lo hice).
Estas pinturas no necesitan plancha ni nada, sólo esperar 3 días para lavarlas (siempre en agua fría).
Y nosotras tan contentas! (bueno, Alicia, como veis, poquito harta de la sesión de fotos…;)