Piso nórdico: el arte está en las paredes

La vida de blogger, en muchas ocasiones, me ha traído mil cosas positivas. Sin embargo, para mi casa (aunque es cierto que ahora hago más DIY y le pongo especial empeño a crear rincones bonitos y a captar esos momentos cotidianos con chispa, bendito Instagram) estos últimos años han sido un no parar de estar patas arriba.

Vale, que sí, que a todos nos gusta lo de cambiar los muebles de sitio. Pero con límites. Conste que no es propósito de año nuevo, ni nada, porque sé de antemano que tengo la batalla perdida, pero sí tengo ganas de «organizar» y dejar «terminado» algún que otro espacio (especialmente esos que se han quedado «a medias» porque he colocado otro para fotos del blog). Pues eso, que me apetece poner un poco en marcha la casa.

Las paredes (que no solo las habitaciones) han «sufrido» mis ansias de DIY y el tema fotos… Que si «cuelgafácil», que si cinta de pegar, washi… Etc. Necesito pintar algunas, y «vestirlas». Podría optar por papel, o bien, crear algún patrón, utilizar vinilo, no sé… Hoy en día hay muchas opciones. Sin embargo, lo que realmente me apetece es hacer una (o varias) composiciones de cuadros. Es algo que puedo «descolgar» fácilmente en caso de necesitar la pared para hacer fotos y, además, los cuelgafácil me dejan libertad para poder cambiar la deco cuando me canse.

Así que en estos días de lluvia, he buscado casas bonitas con muchos cuadros en las paredes. Con composiciones de láminas, arte, diferentes materiales e ideas. Hoy os dejo este piso nórdico de 3 habitaciones, lleno de luz y de mucho espacio. Estancias donde el blanco es el protagonista, y los marcos de las paredes están por todas partes.

Por si a vosotros también os apetece redecorar un poco.

Buen sábado!

Coralia.