Mochila «muñecas del mundo»
Ya lo dice el refrán, «cada maestrillo tiene su librillo». Y nunca mejor dicho.
Cuando mi niña empezó en el cole la profe nos dijo que prefería que los niños no llevaran bolsa de la merienda sino una mochila pequeña. Durante el ciclo de infantil dejaban sus mochilas todas juntas en «la caja de las mochilas» y merendaban en el aula. Después de merendar salían al patio a jugar.
Ahora mi niña ya está en primero de primaria y, claro, ya es mayor y ya no merienda en clase antes de salir al recreo. Este año toman la merienda en el patio y la profe no les deja sacar la mochila, así que tienen que llevar la merienda en una bolsita que puedan sacar al patio.
Le mando la merienda en una bolsita muy mona con su nombre bordado que le regaló el año pasado una compañera mía. Es muy útil y la usamos un montón. Durante la semana la lleva todos lo días al cole, a wushu, a la piscina… y aprovechamos los fines de semana para lavarla y adecentarla un poco. El problema está cuando se nos mancha a mitad de semana porque, claro, con las prisas de ir a jugar a veces se nos queda ahí la monda del plátano o una rodaja de chorizo o el bote del yogur que acabamos de comer. Cuando la bolsa sufre algún accidente hay que lavarla. Algunas veces conseguimos que se seque a tiempo para el día siguiente, pero en casa no tenemos secadora así que esto no es lo habitual. Y menos estos días que el tiempo no acompaña demasiado y hay mucha humedad. Necesitábamos otra bolsa de la merienda.
Estaba viendo telas para hacerle una cuando me acordé del conjunto de mandilón y mochila que hizo Yolanda (Dos Pinsesas) para su peque que empezó el cole este curso. ¿Por qué hacer una bolsa de merienda cuando podía hacer una mochila? Esa mochilita era perfecta para llevar la niña al cole. Para jugar en el patio mi niña se cuelga la bolsa de la merienda en la espalda como si fuese una mochila así que por la colocación de los cordones era mejor hacer mochila que bolsita. Esto no significa que vaya a dejar de usar su bolsa de la merienda, no, no, no, pero ahora podremos alternar y llevar cada semana una distinta.
La mochila de gatitos de Yolanda, que hace un efecto cenefa en el bolsillo, me trajo a la memoria mi tela de las muñecas del mundo. Esta tela la compré hace tiempo en retales Lidia para hacer el portabebés para Nenuco. Una vez hecho guardé la tela y no volví a pensar en ella hasta que me planté hacer algo para la merienda hace unas semanas. Fue entonces cuando la rescaté de la caja de las telas y me puse a medir y calcular para qué me llegaba porque me quedaba un retal grandecito y había de sobra para hacer la mochila y algo más.
¿Y en qué empleé mi tela de muñecas? Pues hice dos mochilas, una para mi niña y otra igual para una amiga. Y aun me sobró para hacer la pizarra enrollable que os enseñé hace unos días.
Como podéis ver en las fotos, la tela de muñecas la utilicé para hacer el bolsillo delantero de la mochila, que se cierra con cremallera. Hasta que hice las pizarras nunca había colocado una cremallera «normal», sólo había probado a colocar las cremalleras invisibles. Después de tanto practicar con las pizarras y las mochilas ya soy una experta colocadora de cremalleras, jajaja.
Para la parte exterior de la mochila utilicé la tela rosa que también compré en su día para combinar con la de muñecas en el portabebés de Nenuco. ¿A qué es preciosa? Además de ser bonita tiene un tacto muy agradable.
Para el interior utilicé una tela de rayas en rosa y blanco que compré en Base Básica. De entrada pensé que me llegaría la tela rosa para el exterior y el interior de las dos mochilas, pero resultó que no.
Para hacer la mochila seguí el fantástico tutorial de mochila con cremallera de Pandilleando. En este tutorial, Yolanda explica perfectamente cómo hacer la mochila en 3 tamaños diferentes. Además de la mochila con cremallera tiene otro modelo de mochila «con ventanita» que es muy simpático. Si buscáis un poquito en Pinterest o con ayuda de Google seguro que encontráis más tutoriales para hacer mochilas para grandes y pequeños, como por ejemplo la mochila con bolsillos de «Para mi peque con amor» o la mochila super fácil de «Mi primera máquina de coser».
¿Qué os parece mi mochila? ¿Os gusta? A mí personalmente no me gusta, me encanta, y lo mejor de todo es que a mi niña también le encanta su mochila nueva.
Fiestas de enlaces: Meitlisache Februar 2016