DIY San Valentín Ñoño… Y a triunfar!

Muy buenos días! El año pasado, en una quedada WeDeco, hice una lámpara forrada de flores que os gustó especialmente (aún es de los post que más visitáis!) y, con esas mismas flores, este año os propongo una sorpresa para el día de San Valentín, de esas un poco ñoñas (por cierto que mañana también tendremos post de San Valentín, pero nada ñoñero y con una colaboración muuuuy especial) a bajo coste y que sorprenden mogollón… Además, os aseguro que estas letras hechas de flores, quedan tan bonitas, que os dará pena retirarlas…

Bueno, lo primero que quiero comentaros, es que ésto va al gusto del consumidor. Es decir, cada uno que escriba el mensaje que quiera, las letras que quiera… Etc. Lo mismo con las flores. Creo que lo importante, es hacer algo especial (ese día u otro cualquiera) y que le alegre el día a la otra persona. Algo de dejarle con la boca abierta, vamos…

Así que no hay excusas… Adaptando, que es gerundio… y a triunfar 🙂

Buen día!

Coralia.

(Y al final del post, todos los pasos!)

*Alambre grueso
*Alambre de bisutería
(mejor en verde. También podemos utilizar alambre de floristería)
*Tijeras, tenacillas…
*Flores

Obviamente, lo primero que tenemos que encontrar son unas ramas en flor que nos queden bien bonitas y vistosas 🙂

Aquí en Galicia, empiezan a crecer ya silvestres.
Así que, es salir al monte en busca de algo que nos guste para hacer las letras (por supuesto, también pueden ser ramas, hojas de eucalipto, etc si no podemos hacernos con flores.

A continuación, cortaremos el alambre (debe ser bastante consistente y en este caso no nos vale el de bisutería).
Cuesta un poco darle forma, pero como ha de quedar perfecto,
tampoco nos importa.

Hacemos cada letra individualmente.
Podemos también hacer otras cosas más romanticonas(por ejemplo corazones, pero eso ya lo dejo al gusto del consumidor…).
Es buena idea colocarles peso encima, para que nos queden bien «planas» y luego resulte más fácil colgarlas.
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Ahora cortamos las ramas de flores en trozos más pequeños con los que podamos trabajar.

Preparamos también el alambre de bisutería, dejando a mano secciones cortadas (así nos resultará más sencillo el montaje).

Poco a poco, unimos ramas con el alambre grueso, siempre ayudados del otro para que queden bien sujetas las flores.
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Cuando ya tenemos nuestras letras listas,
podemos pulverizarlas con agua.

Es obvio que es un montaje efímero, así que no debe pasar mucho tiempo hasta que demos la sorpresa… O las flores se quedarán marchitas.

Al ponerlas en la pared (las mías no tenían mucho peso y con washi la verdad es que resultó suficiente) podemos volver a pulverizar un poco
(con cuidado de no manchar nada).
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Fotografía por PetiteCandela