Haz un collar de hawaiana con papel, lana y cañitas
Hoy es un día muy especial porque no sólo vas a aprender a hacer un collar de hawaiana con flores de papel y cañitas, sino que además vas a verlo en la sección «Vermout del viernes» de Milowcostblog, el blog de Carmen Tébar.
No acierto a explicarte lo que supone para mí participar en su sección con este tutorial. Es la primera vez que me proponen hacer algo así y todavía no me lo creo. Cuando leí su mail me sentí como cuando el capitán del equipo de fútbol le pide a la rarita de la clase si quiere ir con él al baile de fin de curso. La sorpresa y esa sensación de «Vaya, así que lo que estoy haciendo gusta a la gente».
Y como le pasa a la chica de la película, sabiendo que Carmen siempre trae a su blog contenidos de muchísimo nivel, al imaginarme entre ellos me entraron los nervios. Perdí la cuenta de las veces que escribí y borré el texto, y tuve que dejar de hacerle fotos a la niña porque sencillamente dijo basta y me plantó.
Temía no estar a la altura, pero cuando Carmen me mandó el borrador y lo ví maquetado tan perfecto y tan profesional, con esa tipografía, los colores, e incluso mi foto, que hasta el último momento no se la mandé porque soy miss antifotogenia, me quedé enamorada.
Era yo y era mi collar, pero tan diferente y a la vez tan precioso después de pasar por sus manos mágicas que no podía creerlo. Siguiendo con el guión de la película, era igual que cuando la chica pasa por chapa y pintura y aparece en lo alto de la escalera al llegar su cita a recogerla.
Desde aquí sólo puedo darle las gracias a Carmen por contar conmigo y por darme la oportunidad de exponer mi trabajo en su blog. Si quieres verlo, pásate por aquí y toma un vermut a mi salud.
Y luego aprovecha y date una vuelta por el blog de esta granaína amante de las cosas bonitas, la decoración y las manualidades, como ella misma se define, y verás cómo repites más veces para ver sus DIY, las recomendaciones que hace todos los viernes y las cosas bonitas que recopila en su sección de domingos adorables, además de sus imprimibles y los recursos molongos.