diy: maceta con pasta de modelar
Hoy tenemos nuevo tutorial con pasta de modelar. Ya sabéis que adoro este material. Podría hacer un blog solo de él, jejeje. Esta vez me he lanzado a algo más grande y he hecho una maceta. No es la más perfecta del mundo, ¡pero a mí me encanta!
Compré hace unos días plantas y no tenía maceta para esta carnívora. Además, tenía que tener la medida exacta, ya que, al no ir «hacia arriba», si le ponía una maceta un poco más grande, no se iban a ver. Por ello, como tenía un poco de pasta de modelar, decidí hacerla yo misma. Al final se me ha quedado un poco más corta, pero bueno, así seguro que no se estropea la planta.
Es la primera vez que hago algo tan grande con pasta de modelar, pero estoy contenta con el resultado. ¡Espero que os guste!
Yo usé la maceta como guía, pero también podéis hacerlo sin guía alguna (aunque es más complicado). ¡Vamos a ello!
Necesitamos:
– Pasta de modelar
– Rodillo o similar (yo uso un bote redondo)
– Cartulina
– Cúter o tijeras
– Pintura
Para comenzar, medimos, ayudándonos de la maceta de guía, el perímetro de la misma con la cartulina. También el alto. Así, recortaremos la cartulina con el largo y el alto necesarios para poder hacer la maceta.
A continuación, amasamos la pasta y con el rodillo la estiramos. No hace falta que esté demasiado gordita, así ahorramos pasta. Con ayuda de la cartulina recortamos el rectángulo que necesitamos para la maceta.
Colocamos la cartulina de nuevo en forma de cono, y con ella nos ayudamos para recortar el «culo» de la maceta sobre otra pasta amasada. Cuando lo tengamos, colocamos el rectángulo primero en forma de cono y lo situamos encima.
Lo vamos uniendo, con la ayuda de un poco de agua en los dedos, y también podemos ir añadiendo restos de masa en las uniones, para reforzar.
Cuando ya tengamos la estructura de la maceta hecha, dejamos secar al aire libre. Podéis hacerlo con la cartulina dentro para ayudar a que se mantenga la forma. Siempre digo que lo ideal es dejarlo unas 24 horas.
Si queréis hacerle un agujero en el fondo, podéis hacerlo con un lápiz antes de que seque
Una vez esté seco, podemos darle con una lija para redondear bordes, eliminar imperfecciones y corregir la forma.
Después, si queremos, podemos pintarla. Yo usé chalk paint y le di una primera de blanco, para que fuese más puro y tapar imperfecciones, y otra de verde. Durante el proceso debéis tener cuidado ya que se os puede romper, como me ocurrió a mí. ¡Pero aun así me gusta!
¡Y listo! Ya tenemos macetita.
También me gusta cómo queda con los cactus dentro:
Con esta técnica, además, podemos hacer tantos como queramos, y del tamaño que necesitemos. Además, podemos pintarlos de mil formas, adornarlos, o aplicarle estampados como hicimos con estos adornos.
¿Qué os parece?