Chalk paint para renovar un cubrerradiador
Seguramente porque vivo a algo más de 300 km de la playa más cercana, ver el mar con sus olas, su solete reflejándose y esa arena tostadita, me parece la imagen más relajante e idílica de lo que soñamos que sea nuestro verano.
Esa combinación de azules y arenas me baja la tensión hasta después de volver de un atasco en la M30.
Por eso quise traer la magia del mar a mi casa, más exactamente a mi recibidor. Este espacio no es del todo pequeño pero sí lo es el radiador. El piso traía un radiador de sólo dos lamas que parecía perderse en la pared blanca.
Y como nuestra idea era tener una repisa donde colocar algunas fotos y algo de decoración, la mejor solución que le vimos fue hacernos con un cubrerradiador.
Concretamente este cubrerradiador de madera comprado de segunda mano, que ya sabéis cómo me gusta rescatar muebles.
Así en madera oscura ya me parece precioso pero quería unos tonos más claros y más frescos. Así que sin más dilación os enseño el proceso y el resultado.
Materiales
- Cubrerradiador de madera
- Pintura chalkpaint Autentico Blanco antiguo
- Pintura chalkpaint Autentico Café au lait
- Lija, pinceles y rodillo
- Cera para muebles incolora
Paso a paso
1. Proteger la zona de trabajo con cartón o plásticos, sobre todo la zona donde vamos a usar pintura.
2.Limpiar y lijar. Siempre siempre en muebles cuya madera no es virgen. Limpiaremos y lijaremos toda la pieza. En este momento es importante retirar suciedad o grasa. Una vez lijado, retiramos el polvo con un paño húmedo.
3.Pintar. Damos la primera mano de pintura sobre el cubrerradiador y dejamos secar.
4. Lijar entre capas. Entre capa y capa lijaremos con una lija fina para evitar las marcas de los brochazos. Como el cubrerradiador tiene tantas lamas, he preferido usar brocha para pintar las primeras capas, así llegamos bien a los recovecos.
En este caso, al aplicar las primeras capas con brocha no necesité más que dos capas. Si usáis rodillos de espuma, tendréis que aplicar más capas, ya que la cantidad de pintura que aplica en cada pasada es mucho menor. Eso sí, os evitaréis lijar.
5. Pintar los detalles. Una vez seco, he usado un rodillo de espuma pequeño para pintar las lamas con Blanco Antiguo.
6.Encerar. Cuando la pintura esté seca, usaremos la cera incolora para madera. Podemos aplicarla con un paño limpio. La extenderemos bien hasta lograr una acabado suave al tacto. La cera incolora evitará que se pierdan los tonos blancos.
Y así de fácil, tenemos un cubrerradiador nuevo y¡ con aires veraniegos!