Tutorial frascos con efecto escarcha por Craftástico
¿Os parece raro regalar algo metido en un frasco de cristal y que no sea mermelada? ¿Y si es un frasco de cristal cubierto de escarcha que no se deshace?
Personalmente utilicé este truco las Navidades pasadas para regalar a todos los de mi familia unos calcetines de lana hechos por mí, y todo el mundo quedó encantado con la idea; así que este año la comparto con vosotr@s por si alguien se anima.
Si os gusta, ¡empecemos!
Necesitaremos los siguientes materiales:
1) frascos de cristal limpios y secos
2) pincel sintético fino
3) pegamento «Rak-Rak»
4) purpurina
5) pelusa en polvo
6) un recipiente con agua para mojar el pincel y un trapo o papel de cocina para secarlo.
1) Lo más importante de este tutorial es el pegamento, por esto he de deternerme un poco más en él. Aquí os lo presento, esta maravilla se llama «Rak-RAk» y es de la marca «Innspiro», personalmente lo compré en una tienda de material para manualidades, así que no creo que sea problemático encontrarlo.
No sé si es posible hacerlo con algún otro pegamento, éste en principio está diseñado para pegar aluminio a prácticamente cualquier superficie, por eso el resultado es tan bueno: al final la pelusa queda muy bien fijada. La única pega es que el pegamento huele MUY fuerte, así que hay que ventilar la habitación con frecuencia o, incluso, utilizar una mascarilla (yo no lo hice pero sigo viva).
2) Otro elemento clave son los polvos de pelusa; tal y como indica su nombre, realmente se trata de unas pelusas diminutas que se hacen en multitud de colores, pero para crear nuestro «efecto escarchado» necesitaríamos las de color blanco, que mezclaremos con un poco de purpurina para obtener la textura de diminutos cristalitos de hielo. Los polvos de pelusa no son difíciles de encontrar: se venden en las tiendas de materiales para manualidades, en Internet o puede que también en las tiendas especializadas en cosas para manicura profesional, ya que se utilizan para la manicura de «uñas de peluche»:
Podemos dibujar con toda la tranquilidad del mundo ya que el pegamento tarda en secarse. Y si vemos que el pincel ya no se desliza con suavidad sobre el cristal, lo limpiamos con agua, lo secamos (es importante secar el pincel para que no nos vaya disolviendo el pegamento al volver a mojarlo en éste) y seguimos dibujando, hasta que el pegamento empiece a volverse trasparente. Como podéis ver en la foto, el proceso se hace «a trozos»:
4) Cuando vemos que el pegamento se ha vuelto trasparente, hacemos una mezcla entre la pelusa y la purpurina blanca para que la escarcha tenga un toque de brillo y la echamos con generosidad encima del frasco (y que no se nos olvide poner una hoja o un periódico debajo para volver a recoger la pelusa y purpurina que no se nos haya pegado).
5) Si nos queda superficie de frasco sin pintar repetimos el proceso, intentando no tocar las áreas «escarchadas». Cuando estemos del todo, dejamos los frascos que se sequen (dependiendo de la temperatura pueden tardar entre 5 y 24 horas) y una vez secos podemos meter dentro cualquier objeto pequeño para regalar, como podrían ser bufandas finas, o calcetines de lana,…
… bombones u otros objetos pequeños …
… o también los podríamos utilizar como portavelas …
¡Y ya está!
Seguro que si os animáis hacer este tutorial sorprenderéis gratamente a los destinatarios de los regalos dentro de los frascos estas Navidades.
Quiero agradecer a Anne la oportunidad de publicar en su blog, así como a tod@s los que habéis leído el post y sólo me queda desearos Felices Fiestas 🙂
Post invitado de Julia del blog Craftástico