funda para tu cámara hecha de orillos
Hoy voy a contaros lo que sin saber coser puedes hacer con las tiritas del borde de las telas, el orillo, que yo guardo con fruición, tengo frascos llenos de ellas:
una funda para tu cámara compacta muy sencillita, ideal, una vez más, para quien no sabe coser*
* Voy a añadir una etiqueta de las que se ven en el pie del blog, será: “sin saber coser”
Es una alegre funda de consolación, y es que de un tiempo a esta parte únicamente utilizo la reflex, cosa que me da la misma alegría, por tenerla, que pena, por abandonar a la peque. Así que compactita mía…
tienes un nuevo vestido, el anterior tan negro, masculino, y roñoso… pasó a mejor vida.
Pero habrá quien se pregunte, ¿qué son los orillos esos?
Pues los orillos son los laterales de las telas, normalmente más gruesos y/o tupidos que el resto de la pieza, habitualmente con una inscripción con el nombre del diseñador, y unos circulitos con las referencias de colores empleados.
Mira cómo en un ratito puedes hacerte esta funda para tu cámara, para tu móvil, o para lo que sea, la cuestión es cumplir esta máxima femenina:
tener estuchitos, funditas y bolsitas para todo, incluso para guardar lo que aún no existe.
Y ahora vamos a ello.
Los materiales:
- tiras de orillo
- un trozo de tela del mismo tamaño que resulte la pieza de tiras cosidas entre sí
- tijeras y alfieres
- goma elástica
- máquina de coser e hilo
Los pasos:
1. Unimos tira a tira, con la tranquilidad de que nuestro objetivo es obtener un trabajo imperfecto, no es necesaria la perfección porque este diseño no lo requiere, vas a ver qué fácil.
2. Cuando ya tenemos nuestra pieza, cortamos otra de idéntico tamaño para que haga de forro, y rematamos los cuatro lados de ambas.
3. Juntamos ambas caras mirándose del derecho, derecho con derecho unimos con alfileres dejando un espacio libre sin coser
4. Una vez cosido se le da la vuelta por el agujero que dejamos libre, y con alfileres fijamos este trozo para así cerrarlo.
Nota. Para que me quedara un trozo raro ahí con un pespunte, y por no querer hacer puntadas a mano que disimularan, pespunteé el trozo que veis con alfileres aquí abajo, el siguiente lado corto, y un trozo de igual medida en el otro lateral. Todo esto por disimular y que quedara mono, pero es opcional, claro: la cuestión es cerrarlo como sea.
¿Ves?, ya lo tienes casi hecho, y reconozcámoslo, la reflex mola, pero cargarla todo el tiempo mientras subes a un castillo bajo el sol del verano…
5. Ahora colocamos y cosemos la goma del siguiente modo: doblada como ves, centrada a lo ancho, y a unos 4 cms. del borde superior
6. Con otro trocito de orillo doblado sobre sí mismo, tapé las puntadas de la goma y ademas la afiancé. La longitud de la goma tendrás que calcularla sobre la marcha, depende del tamaño de tu funda.
7. Se unen los laterales con alfileres y se cosen, dejando el borde estrecho abierto
Ahora sólo nos queda cortar los hilillos de nuestra funda hecha de orillos, y a disfrutarla este veranito.
A mi me encantan estas tiras, siempre las conservo cuando corto telas y es que ya desde niña las recuerdo. Siempre me produjeron curiosidad.
En mi casa había un sofá cuyas fundas había confeccionado mi madre. Eran básicas, nada sofisticado, con diferencias, pero siguiendo esta técnica para hacer una funda de cojín sin cremallera. Se ve que faltándole tela no cortó la parte del orillo, así que siempre que se sacaba uno de los almohadones del respaldo podías ver la tirereta de circulitos de colores correspondientes al estampado floral de estas fundas, como en esta imagen, abajo a la derecha.
Pero… ¡cuidadín!
Conservar el orillo en las telas con el fin de aprovechar la pieza puede ser muy peligroso, y me explico. Yo no soy experta en telas, pero sí que sé que estos bordes de las piezas están confeccionados con una urdimbre distinta, así que al lavarlo puede encoger o comportarse de una forma diferente al resto y dejar tu creación deforme total
Cuando la tela lleva algodón o es 100% es mucho más peligroso, en el caso de las fundas que os contaba nunca sucedió nada, no era una fibra natural, ahora bien, ya os adelanto que el vestidito de mi cámara se lavará a mano, como la ropita buena y delicada ♥♥♥
Esta funda vale para tu cámara, pero con una mayor longitud, para el móvil, las gafas, una libretita (el colmo de los estuchitos, funda para libreta, en fin…), y para todo aquello que sea rígido y quieras conservar a buen recaudo este verano
¿te animas?, ¿te ha quedado alguna duda?, pues entonces pregunta, pregunta 🙂
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