Sacar y cortar patrones de revistas
Hola DIY´ers!! Hoy volvemos con un post costuril (algo rollete) pero crucial si queréis comenzar el intrincado (pero precioso) camino de la costura. Algunas pensaréis que es una tontería, que es facilísimo sacar patrones de una revista…¡Ja! ¡Eso pensaba yo también hasta que compre una! Y entonces menos mal que vino mi madre a rescatarme y a explicarme todo pasito a pasito, a descubrirme los secretos más escondidos de Patrones y Burda, y en definitiva, a enseñarme a coser.
Y como seguro que no soy la unica en el mundo que se ha enfrentado a semejante problema, ahí va mi post. Sigue leyendo si como yo, has gritado «¡socorro!» al ver la imagen de arriba.
Sacar Patrones
Si eres costurera veterana, ¡enhorabuena! Este post no es para ti. Eres mi maestra y eres capaz de sacar patrones de tu mente cual Yoda (la Fuerza es intensa en ti), y plasmarlos en el papel.
Pero para el resto de mortales, tenemos (gracias a Dios) revistas como Patrones o Burda que nos ofrecen patrones en diferentes tallas. Tan sencillo como coger papel de patrones y calcar…y un poco más complicado de lo que aquí se indica (me remito a la primera imagen).
Por eso,sigue leyendo.
Explicaré tomando como ejemplo los patrones de Patrones (valgame la redundancia), pero que valen para todo.
Paso 1: Antes de calcar, cortar, o siquiera quitar las grapas que unen los patrones a la revista…
¡Ve a la descripción de la prenda! ¿Por qué digo esto? Bueno,básicamente porque allí nos vienen todas las descricipciones, tanto de los patrones, como de la prenda en sí para su confección. En esta parte nos viene:
– Dónde está nuestro patrón.
– En qué color/traya está la talla que queremos (puntos, rayas, o rayas con espacios, tú eliges)
– Nos dicen también las piezas a cortar, y también, si las tenemos que cortar dobles, al bies…etc.
– Y lo más IMPORTANTE: un esquemita de nuestros patrones. Mas tarde os diré porqué.
Paso 2: Quitamos grapas, y buscamos las hojas donde está nuestro patrón. En mi caso sería en el suplemento 4 cara A. Luego buscamos nuestro patrón y talla (os ayudará buscar por color, forma del patrón que hemos visto en el esquema, y forma de la raya de la talla). Una vez localizado, podemos empezar a calcar.
Paso 3: Calcamos el patrón. AQUÍ es donde tiene su importancia el esquemita anterior. ¿Por qué?
– Nos chiva la forma de nuestro patrón (y eso ayuda mucho a la hora de buscarlo en la hoja)
– Nos chiva todos los aplomos de la prenda (y que no se nos puede olvidar copiar)
– Nos chiva también las vistas, las pinzas…etc. (y que igualmente DEBEMOS copiar)
¿Porqué hay que copiar esas rayuelas, rectas, triangulos…etc? Pues porque posteriormente, serán guías en la confección, o serán nuevos patrones a sacar, o cosas que deberemos coser (aquí os explico lo que son). En cualquier caso son IMPORTANTES, no los olvideis.
Y aquí terminaríamos de sacar nuestro patrón en papel. Quedaría ya solo fijarlo a la tela, y cortar.
Cortar patrones
Para esto,es importante tener claros tres conceptos: dirección hilo, orilla y biés, y creo que la mejor manera de verlo es con una imagen.
Son como los puntos cardinales de la tela: imprescindibles para cortar bien tu patrón.
– Dirección hilo: siempre tendréis que cortar vuestras prendas siguiendo la dirección del hilo (a no ser que pidan que sea al biés expresamente). Si no lo hacemos así, nos cambiarán algunos aspectos de nuestra prenda, porque la caída no será la misma.
– Orillas: son los bordes lonjitudinales de la tela.
– Biés: es cortar la tela a 45º grados de la dirección del hilo. Con el corte al biés lo que sucede es que va a cambiar la eslasticidad: nuestro corte va a ser más elástico. Y esto resulta muy útil en algunas prendas.
En internet hay un motón de explicaciones mucho más detalladas, pero yo he querido ir a lo básico y fundamental.
Quiero que quede claro antes de seguir que no soy costurera profesional, y que la forma que aquí os detallo es como YO lo hago, que no pretendo dar lecciones. Quizás haya otras maneras, pero creo que al final, todas seran más o menos iguales. Lo importante son las ganas de coser bien y de aprender. Y el resto, como decía mi abuela, es lo de menos.
¡Un beso, nos vemos en el próximo DIY!