Mis básicos (I)

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Cuando empecé a dedicar gran parte de mi tiempo libre a hacer scrap me empeñé en que tenía que conseguir hacer grandes proyectos con lo basiquísimo en instrumental. Aún no tenía mucha práctica, y con tan poco material me costaba inspirarme y me frustaba rápido. Así que me puse a buscar tiendas de scrap, vi un montón de vídeos, me puse delante de Pinterest como si me tuviera que aprender la lección, y saqué un montón de inspiración y recursos. Es cierto que con cada proyecto he ido completando mi colección (tampoco hay que abusar de primeras…) y que cada vez que me planteo un proyecto nuevo intento pensar qué herramientas puedo aprovechar. ¡Así es otra cosa! Con material versátil ya sí que nos podemos explayar y crear a nuestro gusto.

De momento, comienzo con algunos elementos que tengo en mi «estudio» de scrap y sin los cuáles ya no puedo vivir.

Tintas

Tinta que veo, tinta que quiero. La familia ha empezado a crecer hace relativamente poco, por eso aún cabemos en la misma casa.

Soy totalmente fan de Tim Holtz, así que desde que una vez los Reyes Majos me regalaron el primer spray de Distress no me he podido resistir. Además hay que decir que durante este año, cada mes sacan al mercado un nuevo color… En fin, creo que es amor, u obsesión, no lo sé.

Tengo que decir que estas tintas me gustan mucho para mixed media aunque son poco pigmentadas, por lo que el efecto que crean cuando se simula un manchado de pincel queda muy suave.

Puedes ver cómo los utilizo aquí

En cambio la versión de Ranger, Dylusions, son sprays más pigmentados y logran este efecto con más nitidez.

Mister Huey»s lo descubrí en un curso de mixed media y me pareció interesante llevarme uno a cada para explorar sus posibilidades. Encuentro que su textura es como una especie de acrílico muy aguado, da un efecto muy intenso y con brillo. Como pigmenta mucho su uso es más complicado, ya que si te equivocas es difícil de eliminar

Liquid Pearls. ¡Han sido mi último flechazo! Tienen un aplicador perfecto para crear detalles, y su acabado, como su mismo nombre indica, es perlado. Tarda en secar muy poquito. Yo lo utilizo sobre todo para añadir pequeños adornos llamativos.

Por otro lado están las tintas impregnadas en almohadillas.

Yo utilizo muchísimo las Distress (esto es amor del bueno). Existen en tamaño maxi y mini (¡qué gran invento!) y el repertorio de colores es el mismo que el de los sprays (y Markers, Stain… El mundo Distress es muy grande). Estas tintas son de base acuosa con lo que su secado es lento y pueden usarse con sellos (¡ojo! hay que dejar un tiempo para seguir trabajando) o con embossing. Y además, un truco que me encanta, ¡se pueden utilizar como acuarelas! Con un pincel clásico o uno con depósito de agua se pueden hacer infinidad de cosas, todo es probar.

Además tengo tinta VersaCraft, otra de base al agua y por tanto secado lento. Válida también para embossing, e incluso crear proyectos en tela, planchando después con una tela por encima para proteger del calor de la plancha. Las VersaColor son muy parecidas.

En cambio las VersaFine son de base aceitosa, con lo que su secado es instantáneo.

Las figuritas azules que se ven en la foto son Prima Chalk, y son tintas de secado lento con efecto tiza. Se pueden usar con sellos, que impregnan mucho, o directamente en cualquier superficie. El acabado es muy diferente a las demás tintas.

Memento para mi es el «aqui te pillo, aquí te mato» de las tintas junto con Stazon. Son tintas de secado muy rápido, por lo que son geniales para sellos con texto o para poner encima de proyectos con acuarela. Quedan super nítidos.

Aún así, aquí y aquí tienes un par de guías sobre tintas muy completas.

Y esos dos pinceles con carga para agua son una maravilla. Me resistí un poco a probarlos, ya que los pinceles clásicos son estupendos para cualquier proyecto, pero es cierto que son cómodos como ellos solos. Una vez terminas con un color, aprietas un poco y limpias sobre un papel. Así no hay que estar todo el tiempo metiendo el pincel en agua y secando, ¡es un gustazo!

Embossing

Este efecto creo que es de los más buscado al empezar en el mundo del scrap. Cuando uno empieza quiere dar relieve y movimiento a sus proyectos y creo que todos nos vemos atraídos por estos polvitos.

Hay muchos tipos de polvos de embossing, yo he probado éstos, que tienen distinto tamaño de granulado. Por ejemplo, los Zing son de grano más grande, Adirondack es más fino, y aún más fino es el Embossing Powder central, que tiene un efecto transparente. A gusto del consumidor, todo es probar. Lo único que destacaría del uso de los polvos de embossing es que no hay que escatimar en la tinta ni en la cantidad de polvo de embossing que se ponga. Si nos quedamos cortos, el efecto final será granulado, y cuanta más cantidad, más liso queda.

Para adherir estos polvos se pueden usar las tintas de secado lento o un bolígrafo de embossing como el que aparece en la foto, que permite crear las formas que nos apetezcan en lugar de estar supeditados al dibujo de un sello. Como consejo, eso sí, es bueno hacer un dibujo previo a lápiz de la forma que queremos ya que luego tardaremos un tiempo en repasar las líneas y es tiempo en que se va secando la tinta del bolígrafo.

Sellos
Perfectos para layouts, para álbumes, para portadas, tarjetas… Todo es saber cómo combinarlos. Hay tantas formas y tamaños, letras, animales, formas para crear fondos… E incluso uno mismo puede carvar sus propios sellos. Es un auténtico mundo. Yo te enseño una representación de los míos. Tengo algunos de caucho y otros acrílicos. Éstos últimos creo que apañan muy bien y que además si se usan con un metacrilato se pueden usar fácilmente porque el metacrilato, al ser transparente, deja ver dónde estamos poniendo el sello.