Crea tu mesa DIY a partir de una caja de fruta vintage
Al fín lo puedo decir!
Que colaboro con Handbox no es nada nuevo, de hecho podéis ver aquí todos los tutoriales que han publicado y podéis votar para conseguir un kit que os facilite hacerlo vosotros mismos.
A raíz del Recicladero surgió un nuevo reto, y volví de Madrid con una caja de madera bajo el brazo.
Según me explicó Carolina, creadora de EnKaja las cajas de madera para la fruta ya no están permitidas, así que les están buscando nuevos usos.
Y yo tan nostálgico! En mi pueblo, Fraga, siempre las he visto por todos lados, e incluso alguna vez me tocó ir a coger fruta al campo, cosa que debo reconocer es un duro trabajo. No imagino mi infancia sin estas cajas, que tan pronto servían para hacer de asiento improvisado como para resguardar a los gaticos que nacían.
Total, que tenía que tunear una caja. Eso sí, contaba con un ayudante de lujo, el señor Leroy Merlin, que me iba a proporcionar los materiales para que así fuera. Además, este reto tiene un fin: Handbox os preparará un Kit para que podáis haceros con una caja, los materiales y un tutorial hecho por mí para que podáis haceros vuestro mueble «cajeril». Si queréis comprar el kit lo podéis encontrar en la tienda online Handbox clickando aquí.
No tardé ni un minuto en saber lo que iba a hacer con ella: una mesita auxiliar! Eso sí, una mesita que pueda servir para un dormitorio, un estudio o un salón. Si además le ponía ruedas podría ser un mueble «movible», evitando tener que arrastrala para moverla (que rabia me da eso!).
En una excursión a Leroy Merlin me aprovisioné de los materiales necesarios, y aquí debo decir que los chicos de la tienda de Tarragona son majísimos y tuvieron mucha paciencia conmigo.
Una vez en casa es momento de preparar lo que utilizaremos:
Reconozco que no he utilizado demasiado la espuma abrasiva (la lija-esponja), ya que mis tuneos los suelo hacer con lijadora eléctrica, pero es comodísima de utilizar y además se mete en los rincones entre tablas que da gusto!
Así pues el primer paso es el de lijar, lo cual además de suavizar la textura de la madera la «limpiará» de impurezas.
Aquí tenéis la foto con las astillas:
Y aquí tras pasar la espuma. No se trata de dejar la madera impoluta, si no de suavizar, ya que en este caso irá pintada. Si queréis dejar la caja con color natural os tocará lijar un poco más.
Así es como quedó la caja tras el lijado, mucho más limpia y suave al tacto. Ya lista para atacar!
Lo siguiente será pintar. Nuestro kit viene con 3 paletinas de 60, 40 y 20 mm. Las de mayor tamaño son perfectas para pintar «a saco» y la pequeña para rincones y hendiduras.
En mi caso primero pinté el interior. Quería un mueble lumionoso y opté por el blanco, lo cual hará resaltar lo que dejemos en su interior.
En el kit solo viene un color, y se me antoja que podría quedar bien dejando partes de color «natural» tapándolas con la cinta. Si me hago con otra caja lo haré para que veáis el resultado 😉
En el kit solo viene un color, y se me antoja que podría quedar bien dejando partes de color «natural» tapándolas con la cinta. Si me hago con otra caja lo haré para que veáis el resultado 😉
Pero no quería renunciar al color, así que por fuera la pinté de turquesa (aunque parezca verde botella, todo un expediente X).
Una vez pintada la caja queda «nueva». Debo decir que durante el proceso de darle color no tuve precaución y alguna que otra gota se escapó. Además los cantos no los encinté y quedaron un poco irregulares. Peeeeeeero… no es problema, ya veréis!
Para que no quede tan sosa, podemos optar por decorarla. Para mi caja elegí un triángulo en el interior. Cómo se hace? fácil, con la cinta de carrocero dibujamos la forma. Es importante presionar la cinta (con los dedos o un paño) para que no se levante al pintar o se cuele la pintura por debajo. Lo cual sería un desastre!
Una vez bien fijada la cinta de pintar (o de carrocero) pintaremos el interior de la forma. La forma de pintar será dando «toques» con la brocha en la zona donde está la cinta, ya que si arrastráramos la paletina podríamos levantarla.
Es momento de dejar secar. Entonces retiramos la cinta y… ya tenemos nuestro trabajo de pintura terminado!
Como decía se ve demasiado impoluta, y esta será una caja «Vintage» o «Hipster» (moderna pero pretende ser retro, buen calificativo de una amiga con el que nos reímos un rato).
Así que a lijar de nuevo, pero esta vez con el papel, insistiendo en cantos y goterones. Cuanto más lijes más vieja será tu caja, y yo para esta no tuve piedad.
Como decía antes quería una mesita «movible», así que con unas ruedas con pletina y unos tornillos cortos lo conseguí. Además. al ser una madera tan blanda no supone ningún esfuerzo ni más herramienta que un destornillador de estrella.
Una vez puestas las 4 ruedas… es el momento de darle la vuelta!!!
Esto ya está…
Y aquí tenéis mi cajita Hipster disfrazada de mesita de noche, con mi despertador, libros y gafas.
También la podría haber puesto en el comedor como mesita de teléfono o para las mantas o en mi estudio con la impresora… como véis toda una polifacética!
Recuerda! Si quieres una mesita tan versátil como esta tenéis que clickar aquí y recibiréis la caja de madera y todos los materiales que han aparecido en este post!
Puedes comprar tu Handbox con todos los materiales para hacerlo aquí.