Los que amamos el diseño y la decoración sentimos cierta emoción cuando nos encontramos con un espacio, un mueble o un objeto que nos inspire. Nos gusta tocarlo todo, sentir las formas y el tamaño del mobiliario, la textura de los tejidos, la influencia de la luz, la variedad de colores, el orden de las cosas… y esto nos hace sentir calma, confort e incluso alegría. Es lo que llamamos Interiorismo Emocional.
El
interiorismo Emocional más que una tendencia, es una
forma de entender la decoración. Los que valoramos el diseño interior, entendemos que cualquier persona tiene la necesidad de
convertir su hogar en un espacio alegre,
donde reine la armonía y prevalezca la funcionalidad. Todos buscamos un hogar agradable y cómodo donde formar nuestra propia familia, remansos de paz donde encontrar la felicidad.
La corriente más minimalista del estilo escandinavo o también denominada
Decoración nórdica minimalista, es uno de los estilos que nos ayuda a conseguir un
hogar emocional. A través de la elección de colores, texturas, formas o ciertos materiales, podemos conseguir la armonía en nuestra casa. Los
espacios libres de obstáculos, con solo los muebles y objetos necesarios, tejidos ligeros, colores neutros y materiales naturales como la madera o la piedra, nos ayudaran a conseguir este tipo de emociones.
Para conseguir un salón o un dormitorio con una decoración nórdica minimalista, debemos estudiar primero el espacio y pensar en la orientación adecuada para los muebles más pesados, ya sea la cama, un armario, el sofá o la mesa del comedor. Siempre lo más cerca posible del foco de luz natural y pegados a una pared, para no interferir a la vista. El resto de muebles y objetos deben seleccionarse en función de su uso, color y tamaño. La idea es conseguir un equilibrio del espacio y no llenarlo de objetos innecesarios. Los muebles de madera de estilo nórdico son perfectos para conseguirlo.
La
decoración del resto de las estancias de la casa debe seguir las mismas premisas. Los recibidores, cocinas, estudios y pasillos deben apostar por los colores neutros, materiales traídos de la naturaleza y ningún obstáculo que entorpezca a la vista. Los
muebles de madera aportaran naturalidad y confort que tanto buscamos.
Los
baños también se apuntan a esta corriente nórdica minimalista y apuestan por
líneas puras, materiales naturales y colores neutros. Están exentos de objetos decorativos y en ellos se impone la funcionalidad.
Os dejo con una selección de muebles que siguen las premisas del Interiorismo emocional:
¿Qué emociones te transmite la decoración de tu casa?