Fundamentos de la costura a máquina que nunca debes olvidar
Seguro que más de una vez has tenido que frenar en seco ante un pequeño contratiempo mientras realizabas algún proyecto. Es desesperante, ¿verdad?
Uno cree estar con los cinco sentidos a lo que está realizando en ese momento, aunque quizá sea un trabajo que ya ha realizado con anterioridad, y por alguna extraña razón el resultado no es para nada lo que esperaba.
Ante eso hay varias opciones, pero desde luego la menos deseable es la de tener que rehacer todo de nuevo. A veces esos fallos nos sirven para recurrir a algún improvisado toque de creatividad que tape esos desperfectos, pero claro no siempre es posible esconder tales errores.
Por eso, hoy vengo a hablarte de algunos fallos que yo cometía (bueno, no me voy a echar flores) que aún cometo, por puro despiste o exceso de confianza, o simplemente porque me distrae una mosca… para que tú los evites cuando coses, siempre que puedas. ¡Comenzamos!
DECÁLOGO DE BUENAS COSTURAS
- Bajo ningún concepto se te ocurra usar una tela de esas típicas que tanto se deshilachan, sin haberle hecho un repulgo ( aquí te explicaba, hace algún tiempo, qué es esa palabreja tan rara). Por cierto, si te quedas hasta el final de este post, podrás ver un vídeo donde se nos explica a la perfección cómo realizarlo.
Relacionado con el punto anterior, mi recomendación es que si se trata de telas finas lo hagas sin excepción, antes de ponerte a unir las piezas del proyecto como tal. Y casi mejor si en vez de limitarte al repulgo, y si tu máquina presenta ese tipo de puntada, hagas un cosido tipo «overlock». Así la tela estará mucho mejor rematada aún. Si el tejido es más grueso, es posible que con usar la tijera dentada o de zig-zag te baste, pero recuerda que no siempre es así. Mejor ser previsor y usar como mínimo un repulgo. Espero que no acabes odiando esta palabra.
- A la hora de dejar la abertura o hueco por el que girar el proyecto para ponerlo del derecho, recuerda tener siempre esto en cuenta:
- Procura que esa abertura no coincida nunca con una esquina, pues eso te dificultará luego, al girar las telas del derecho, que esa esquina quede tan bien como el resto. Lo cual sería una pena.
- Aunque hagas piquetes en los ángulos o zonas curvas, y además cortes el exceso de tela, nunca cortes ese sobrante de tela en la zona de la abertura. Lo necesitarás luego para poder hacer la costura que la cierre, tanto si recurres a hacer manualmente la puntada escondida u optas por un pespunte. (Esto debería ser un Sancta sanctorum). No veas la de veces que me he olvidado de este detalle y la he liado parda para buscar luego cómo disimular el estropicio 😰😥😥😥.
- Acostúmbrate a cortar los hilos cada vez que remates una costura. Nada de dejarlos todos para el final. Sobre todo si te estás iniciando en esto de coser a máquina, porque a veces, si en siguientes pasos del proyecto has de pasar de nuevo con la máquina por ese área o muy cerca, se crean nudos feísimos en la parte inferior de la labor que no solo te robarán tiempo, y que puede que hasta rompan o doblen la aguja, sino que puede que te obliguen también a rehacer parte de lo cosido de nuevo. Así que corta esos hilos siempre que sea posible.
- Mantén limpia tu máquina. 👀Con esto no me refiero a que la friegues (nada de agua ni productos jabonosos, por favor), la pulas con cera, como si se tratase de la carrocería de tu coche, ni nada similar, sino a que te habitúes a limpiar el área de la placa de costura, y la del canillero ya sea este vertical u horizontal (aquí veíamos qué tipos de canilleros existen) con un cepillo adecuado. La verdad es que los que vienen con el kit de la propia máquina suelen ser un pequeños y cortos. Yo te recomiendo comprarte una pequeña brocha de maquillaje de esas con pelo suave y que la uses exclusivamente para esa limpieza. Para mí, esa decisión fue un auténtico acierto, desde que alguien en un tutorial lo recomendó. Además, tan importante como esto, es que nunca jamás soples si ves alguna pelusa en el área de costura, porque puede que tu soplido la arrastre hacia zonas internas de tu máquina que son del todo inaccesibles y requieras más adelante de una puesta a punto por un técnico. Así que recuérdalo, por favor. Como puede que aún estés muy verde en esto de la costura a máquina te dejo un par de vídeos con las dos versiones de canillero que existen en el mercado para que aprendas a hacer el mantenimiento de tu máquina.
MÁQUINA CON CANILLERO VERTICAL:
MÁQUINA CON CANILLERO HORIZONTAL:
- Para coser una tela que suelta pelusa, si va unida a otra que no, coloca siempre en contacto con la placa de costura (donde van los dientes de arrastre, etc) aquella que no deje esos residuos a su paso.
- Los alfileres siempre han de ir en perpendicular a la costura que se está realizando, nunca en paralelo. Primero porque así no los pisaremos por error con el prensatelas o la aguja, y segundo para evitar pincharnos al avanzar en el recorrido de la tela. Sea como sea, al igual que en el caso de los hilos, ve retirándolos según te vayas cruzando con ellos. No lo dejes para el final, así será más improbable que te olvides alguno. En cuanto a los mejores alfileres… si tienes los pequeños de cabeza metálica de toda la vida no es cuestión de que compres nuevos, pero si tienes previsto comprar decántate por los que se denominan de Patchwork. Más que nada porque son más largos y la cabeza de plástico plana ayuda a deslizarnos sobre ellos durante el proceso de costura, aunque los coloquemos mal, y además los hace más visibles para evitar despistarnos.
- Ten siempre a mano y a punto la plancha. Puede resultar chocante, pero es verdad que el hecho de planchar las piezas de tela antes de coserlas permite no solo mejores acabados, sino que facilita la costura en sí. Además, tras acabar cada una de nuestras labores, habremos de recurrir a ella también, así que ya sabes. Por supuesto, si dispones ya de plancha (casi seguro que así sea) no tienes porqué invertir en una adicional, pero si te estás planteando adquirir una nueva para la costura, yo te recomiendo una pequeña. De las denominadas para costura (muy compactas, incluso con mango plegable en muchos casos) pues consumen bastante menos que las habituales o si no una de las llamadas «de viaje». Te dejo una imagen de la que yo compré en su día, tras investigar un poco y sopesar varias alternativas, por si te puede ser de ayuda. Respecto a ella te puedo decir que el mayor inconveniente que la encuentro es el sistema de depósito: por un lado su cierre con una lengüeta de goma no me acaba de convencer, y por otro porque la capacidad del depósito es realmente baja. Por lo demás… no la cambiaría en absoluto: presenta doble sistema de voltaje (estadounidense y europeo), permite planchado a vapor, sistema antical y antigoteo, regulador de temperatura (no todas cuentan con él).
- Para cortar bien las telas, si utilizas tijeras emplea unas exclusivamente para ese fin, no cortes papel con ellas, pues acabarían perdiendo el filo. Además, la tijera siempre ha de estar en contacto con la superficie sobre la que tenemos colocada la tela y hemos de cerrarla del todo en cada paso. Es decir, asegurándonos que todo el filo de la tijera entre en contacto con la tela a cortar. Te dejo un par de vídeos que te aclararán más todo esto que te cuento. El segundo, en realidad, incide en cómo cortar con cutter rotatorio y regla de patcwork.
- A la hora de coser guata, como esta se mueve mucho, sujétala con alfileres y/o pinzas, y recorta la pieza siempre algo más grande que la tela a la que la vas a unir, yo lo hago así, incluso en aquellas que son termoadhesivas (ya corto luego el sobrante). Si la pieza que vas a enguatar es muy grande precisarás hacer un acolchado, lo que significa crear líneas o dibujos con costura que sujeten y unan mejor la tela a la pieza de guata. Si la pieza a enguatar es pequeña con que uses la puntada zig-zag para unir ambas bastará. Eso sí, no remates al final ni al principio, pues es probable que te quedes sin hilo porque se deshenbrará la aguja o se te romperá la hebra.
- Cuando cosas tejidos de composición o grosor muy diferente, es aconsejable lavarlos para saber si destiñen, si encogen, etc… Es muy probable que ambos se comporten de manera muy diferente al lavarse, y si los coses antes de esa primera lavada, puede ser que uno encoja más que el otro y el proyecto no quedará todo lo bien que debiera.
- En las zonas más conflictivas, es decir, las de mayor grosor, acciona la máquina con el volante y olvídate del pedal. Eso te permite un mayor control sobre la costura y el avance de la aguja sobre la tela. Da igual que tu máquina sea electrónica o no. Yo, al menos, lo hago así tanto con mi Singer como con mi Husqvarna (electrónica).
- Evita modificar la tensión del hilo. En la mayoría de los casos, por no decir en todos, la que venga puesta por defecto por parte del fabricante será la más idónea siempre que vayas a coser. Y esto es muy importante sobre todo en las máquinas planas/analógicas o como quieras denominarlas. Así que no tengas la tentación de cambiarla. Esa ruleta o botón manipula la tensión del hilo superior, pero aunque la del hilo inferior también se puede modificar, es aún más desaconsejable. Créeme, hazme caso y mantente alejado/a de esa doble tentación. Seguro que lo agradecerás.
¿Qué te han parecido estos consejos? Seguramente que ya los conocías, pero nunca está de más repasar un poco algunas cosillas básicas, ¿verdad?
Espero que te haya parecido interesante mi post de hoy, desvanero. Aprovecho antes de despedirme, para dejarte otro vídeo extra para que conozcas más a fondo cómo hacer un buen repulgo (digamos que el repulgo es una forma de sobrehilado).
Nos vemos, pronto. Un abrazo.