DIY: Segunda oportunidad para unos libros viejos
Bueno, bueno, arrancamos nueva tanda de tutoriales y diy para este mes de Julio. La idea es ir combinando tutoriales un poco más fáciles con otros que tengan un nivel un poco más elevado, ya que así podéis seguir aprendiendo y avanzando poco a poco.
Esta vez, necesitaba y quería unos libros blancos, si os acordáis, ya me hice unos anteriormente que os enseñé aquí pero esta vez los quería completamente blancos!. Los he visto muchas veces por la red y la verdad, es que cada vez que los veía me entraban unas ganas enormes de hacerme con unos. Después de pensar si comprarlos o hacerlos, ya sabéis por lo que me he decidido… pues sí, he decidido hacerlos. Y si estuvisteis atentos a mi cuenta de Instagram el otro día os publicaba esta foto, para dejároslo caer!!
La cuestión es que tengo muchos libros antiguos en casa, así que me ha ido genial porque he podido rebuscar aquellos que por su tamaño y sus tapas me fueran mejor. Se pueden utilizar cualquier tipo de libros pero es preferible que sean de tapa de tela.
Son geniales para decorar cualquier rincón, una mesita de noche, un rincón del salón o incluso la entrada, ya que al ser blancos reflejan mucha luz y son combinables con cualquier color y objeto. Además, muchas veces buscamos complementos que tengan una cierta altura para combinar con otros más bajitos, así que me ha parecido la opción perfecta.
Los materiales son súper básicos y el tutorial también, casi casi que no hay ni explicación pero bueno, ya sabéis que me gusta al menos daros los detalles para que os hagáis con uno. Así que vamos!!!
Materiales:
– Chalk Paint blanca
– Pincel o brocha
– Libros de tapa dura o tapa de tela
– Cordon de algodón
Instrucciones:
Es tan fácil como ir pintando poco a poco todos los libros, las cubiertas y las hojas. Hay que dejarlos secar bien e ir pasándole capas hasta que queden completamente blancos.
Una vez seco, bastará con envolver los cuatro libros con la cuerda y hacer un nudo bien fuerte en la parte de arriba, y listo!
Ya lo podemos colocar en cualquier sitio para que queden perfectos!
Como véis, no puede ser más fácil y además super low cost. Yo no se vosotras pero nosotros en casa tenemos un montón de libros viejos y antes de tirarlos, preferimos darle una segunda oportunidad.