DIY Navidad: Bandeja recuperada con decoupage
El DIY que os traigo hoy, surgió como por arte de magia. Sin planearlo, tenía todos los materiales en casa, excepto el principal y detonante, ¡la servilleta de Navidad!.
Es increíble, que algo tan simple puede decorar tanto. Desde este DIY, veo el decoupage con mejores ojos.
Estas servilletas son de Søstrene Grene y las compré en un principio, para decorar unas velas. Sin embargo, una vez en casa pensé que me ayudarían a rescatar una bandeja de madera y transformarla en un cartel navideño.
¿Qué mejor decoración navideña que la decoración handmade?
Y este es el resultado. Si queréis hacerlo en casa, a continuación os dejo los pasos a seguir.
- Tabla de madera o bandeja de madera
- Servilleta
- Cola para decoupage
- Cinta de carrocero y palillo
- Pinceles y brocha
- Pinturas
- Sello de copo de nieve y tinta
Lo primero que haremos será pintar nuestra bandeja o madera de color blanco. El exterior, lo pinté con el pincel seco de manera que quedaran las líneas de lo brochazos. Así da una aspecto frío, como nevado. El interior, será nuestro lienzo en blanco.
Mientras seca, separamos la servilleta en capas y nos quedamos con la capa pintada. Elegid el dibujo con el que queráis decorar y recortadlo.
En mi caso, como quería integrar la servilleta con el resto de la bandeja, recorté los bordes con los dedos, de manera que quedara irregular y se desdibujara en el fondo.
Si es la primera vez que vais a decorar con decoupage, os diré que es una técnica a la que le ponía ciertas reticencias y que al final, me ha ganado.
Cuando uséis la cola para decoupage, aplicadla con mimo,con ayuda de un pincel y siempre desde el interior del papel hacia el exterior.
Dejamos secar mientras pensamos en el siguiente paso, que es continuar el dibujo de la servilleta en nuestra madera.
Es por eso, que con cinta de carpintero vamos a cubrir el borde de la bandeja para no mancharlo.
Como para el fondo no tenía un color adecuado, mezclé azul con un poco de negro para conseguir un azul más apagado que se pareciera lo máximo posible y pinté el fondo, diferenciando bien el suelo nevado del cielo del dibujo.
Hasta aquí, todo bien. Pero a partir de este paso, tendréis que sacar el artista que tenéis dentro. Vamos a pintar árboles a ambos lados de la servilleta, similares a los del dibujo.
Ayudaos de cinta de carrocero para no pintar la zona nevada, como en la imagen.
Después con pintura blanca y el pincel seco, damos pinceladas sobre el color azul, además de estampar copos de nieve por todo el dibujo. Dicho así parece que estos pasos nos llevarán poco tiempo, pero todo lo contrario. ¡Así que paciencia y ganas!
Y algo importante, ¡no os olvidéis de la nieve! Mojad un palillo en pintura blanca y distribuid “puntitos” sobre todo el fondo. Veréis que poco a poco, la servilleta queda integrada en el conjunto.
Los toques finales, los daremos sobre la nieve, creando más sombras bajo los animales con un color azul claro, como en la servilleta.
Y para terminar, pintamos el borde de la bandeja de color rojo intenso y colocamos una cinta en la parte posterior para poder colgarlo.
Este DIY lleva su tiempo, pero os digo que ¡vale la pena! Podría ser una tarde perfecta para entretener a los peque, ¿no os parece?