DIY la cocina de los 200€
Hace unos meses descubrimos que la cocina del piso en que vivimos de alquiler tenía un problema bastante grave: humedad en el módulo del fregadero. Se trata de una cocina antigua y que no se habían esmerado mucho en que fuese bonita. Así que la humedad era la excusa perfecta para reformar un poco esa cocina tan fea.
Tras semanas de charlas con la agencia de alquiler, los propietarios, albañiles… decidieron que lo que cubriría el propietario sería cambiar el módulo que estaba podrido, el fregadero y la encimera. El resto, si queríamos cambiar un poco el aspecto viejo y desaliñado, era cosa nuestra.
Dado que el piso es de alquiler tampoco te quieres gastar demasiado porque no sabes cuánto vas a estar aquí. Así que optamos por pintura de azulejos y vinilo, MUCHO vinilo.
Aquí tenéis la cocina ANTES de la reforma
Materiales
– Papel adhesivo de color Blanco
– Losetas vinílicas para el suelo
– pintura de azulejos blanca
– utensilios de pintura
– cúter
– tijeras
Lo primero fue el tema de los armarios.
Dado que no los puedes cambiar porque vale un dineral, si por dentro estan bien, mi consejo tiene nombre: Vinilo. Yo lo compré en Leroy Merlin. El nuestro fueron diez euros pero hay un montón de opciones en la tienda (en la web no estan todas ni por asomo). En sí es muy fácil: desmontas puertas y la parte delantera de los cajones (son unos pocos tornillos) y forras todo con el adhesivo, luego a su sitio y ya tienes muebles que podrían ser nuevos!
El problema principal para mí eran las paredes, esos azulejos antiguos que se caen a trozos.
Vamos con los azulejos
En una cocina como la mía era importante que ganase amplitud, así que opté por pintarlo todo de blanco. Paredes y pintar de nuevo el techo, que ya le hacía falta. En el mismo Leroy Merlin tienen pinturas para azulejos que son geniales para eso, y por tan solo 30€!
Y finalmente queda el suelo.
Esos azulejos feos como … feos. Poner suelo nuevo era demasiado caro y de nuevo aparecieron los vinilos. En esta ocasión los suelos adhesivos. Resulta que puedes tener algo muy parecido al parquet, instalarlo tu mismo y por solo 30€! Solo necesitas los adhesivos, un cúter bueno y una regla. ¡Ah! y un poco de paciencia: siempre está esa pared que no es tan recta como parecía y pretende amargarte la mañana
En mi caso costó unos 30€, tuve que comprar dos packs de 11.90€. Además tuve suerte porque el que yo quería ese dia lo tenían de oferta. En todo caso, sin la oferta hubiesen sido 22€ por pack. Su colocación es tan fácil que en una hora tuve el suelo acabado y el resultado es fascinante. Mucha gente lo confunde con parquet de verdad.
Los detalles finales fueron lo más divertido
Se trata de ir a Ikea, comprar unas barras nuevas, algun cesto, un cubo de la basura, una cortina y cuatro tonterías más y la cocina está lista. Te gastas aproximadamente 200€ y da gusto cocinar y enseñarla. Ta-chán!
Espero que os haya gustado y que os pueda servir de idea para futuros proyectos! Hasta el próximo post!