DIY Jarrones pintados
¡Buenos díaaas!
Hace tiempo que buscaba algún detalle para darle un toque de color a un rinconcito de mi cocina. Es demasiado blanca y me apetecía animarla un poco.
El caso es que como no encontraba nada que me convenciese, he pintado yo misma unas botellitas y me ha encantado el resultado!!
Os explico todo el proceso por si os animáis, es muy muy fácil…
Esto es lo que yo he utilizado
– Florero Ensidig de ikea en dos tamaños (0,99€ el pequeño y 2,50€ el grande)
– Pintura acrílica (la compre en Tiger, creo que me costó 2€)
– Pintura en spray (sobre 4,50€)
– Cinta de carrocero, washitape o pegatinas.
Los pequeños los he pintado con la pintura acrílica y el grande con la pintura en spray, ahora veréis la diferencia.
1.- Pintura acrílica
Para pintar las botellitas pequeñas con esta pintura lo que hice fue pintarlas por el interior.
Es una pintura que se va muy fácilmente con agua así que tenemos que tener en cuenta que será meramente decorativa (si usas la botellita, en cuanto la mojes, adiós pintura).
Simplemente vamos llenando la botella de pintura y la removemos para que se vaya cubriendo por todo.
Si la pintura os parece muy espesa (en mi caso lo era) podéis añadir un poquito de agua pero ¡¡ojo!! ¡¡sólo un poquito!! Yo en la que iba a ser verde añadí demasiada y la estropeé : S
Quedó muy líquida y, aunque al principio no lo parecía, una vez seca, la capa pintura estaba muy «transparente» así que como no me quedaba más pintura para una segunda capa, lavé la botella (que se quedó impecable) y la volví a pintar pero con spray.
Para que se seque bien y se cubra todo, lo mejor es dejarla boca abajo.
2.- Pintura de spray
Si el paso anterior es fácil, este ni os cuento, menudo invento la pintura en spray. No tiene ningún misterio. Cubres bien la zona para no manchar nada, limpias lo que vayas a pintar, agitas el spray y disparas!!
En mi caso le añadí a la botella grande un par de tiras de washitape para que quedasen fanjas sin pintar.
Lo dejamos secar boca abajo un tiempo y cuando esté listo, con cuidado, quitamos el washi tape y las pegatinas (en la botella pequeña puse unas estrellitas muy monas que compré para Paula en los chinos)
Además de ser una manera fácil y limpia de pintar el resultado no puede ser mejor. Queda perfecto y el cristal se cubre genial.
La pintura acrílica es brillante y la pintura en spray la elegí mate pero podéis comprarla brillante también si os gusta más.
¿Qué os parece? ¿Os gusta mi nuevo rincón? ¿Qué técnica os parece mejor?
Si os animáis a probarlo me encantaría que me lo contaseis y me enseñaseis alguna foto.
Yo ahora me he enganchado a la pintura y voy buscando cosas en casa que pueda pulverizar… jajaja…