DIY idea para bajo plato
¿Alguna vez le has puesto música a tu vida?
Seguro que en tu baúl de los recuerdos hay temas memorables.
En el mío puedes encontrar de todos los estilos, y de todas las épocas.
Unos los viví de cerca, los otros heredados, son viejas y conocidas melodías,
que perduran y sobreviven en el tiempo.
Aunque si te gusta el DIY que te propongo hoy,
tendrás que tener un tu haber grandes albúmes,
o también conocidos como «long play», LP.
Hace años, que no tengo tocadiscos, pero a pesar de mudanzas,
y vicisitudes varias, he sido incapaz de deshacerme
de las músicas que tan gratos y buenos momentos me hicieron vivir.
Otro material que se necesita (hoy la cosa se sale de lo típico),
es tener un buen tocho de enciclopedia, o sea libros, pero eso sí,
cuanto más mazacotes y cuanto más pesen mejor.
Desempolva el estribillo que te inspire,
y cúbrelo con film transparente.
Gracias a mi madre he adquirido un gran gusto e interés,
por la música clásica.
Cuando ví el LP del Bolero de Ravel,
me parecieron las notas perfectas para acompañar mi trabajo.
Y es que esta obra musical, tiene algo que engancha,
es repetitiva, tiene siempre el mismo tempo.
Tan solo varía que va «in crescendo».
Dura aproximadamente un cuarto de hora.
¿No la oyes?, nan na na naaaa…., na na na na na na nan na na naaaaa….
Una vez terminada la sinfonía,
cúbrela de nuevo con film transparente.
Pero como es tan pegadiza, cuesta, cuesta quitársela de la cabeza.
Le pongo un peso pesado encima, a ver si logro aplacarla del todo.
La dejo así toda la noche,
con un poco de suerte mañana por la mañana,
se me habrán desenganchado todos los acordes.
Al estar tan cubierta, aún está un poco pegadiza.
La dejo secar por completo, y acabo con todas las notas excesivas.
Y ahora ya sí, se me ha quitado ya el na na, de la mollera 🙂
Esta es mi idea para un bajo plato diferente,
y low cost, perfecto para llevarlo al Finde Frugal de MarcelaCavaglieri.
Ahora que lo veo desde esta perspectiva,
quizás le falta un poco más de repetición.
Aunque me gusta como ha quedado.
Y ya que he desenterrado, tantas canciones,
será cuestión de ir recordándolas una por una.
Seguro que cada una de ellas evoca y constituye
una reproducción única, diferente e inolvidable.
¡Qué pases un estupendo fin de semana!
¡Un beso!