Diy: cómo hacer botones de piel con retales
La piel es un material muy versátil con el que se pueden realizar, además de prendas, claro, infinidad de objetos prácticos o decorativos, y combinando colores y texturas vas a descubrir nuevas utilidades y resultados, es cuestión de ponerse a jugar.
En este caso te voy a mostrar un “juego” que yo practicaba cuando tenía veintitantos añitos. Tejía unos bolsos de cáñamo, yute, algodón, de diversos materiales rústicos, cuyo cierre consistía en un botón de cuero como el vas a hacer hoy si quieres.
Este es un post que tengo preparado hace meses y meses, pero que por uno u otro motivo no había salido a la luz, y comparado con este bolso del ejemplo… debe tener unos 16 añitos, ahí es nada. Y no es que me haya dedicado a la creación toda la vida, sí como necesidad, sin dudarlo, pero no profesionalmente
Estos botones o lo que tú quieras que vayan a terminar siendo, son el resultado de “lonchear” con un cutter cortaditas de una especie de chorizo cueril, y para ello necesitas:
- Pedazos de piel de cualquier tipo y colores, al menos tres colorines: ante, napa, cuero…, lo mismo da
- Cola de contacto
- Una espatulita, bien puede ser una de las dos partes de una pinza de la ropa, para distribuir la cola
- Pinzas de la ropa (dos o tres)
- Un par de gomas elásticas
- Papel para proteger la mesa
- Utensilios de corte: tijeras, cutter, y regla para que todas las piezas tengan el mismo ancho, el largo no importa
- Fundamental: un espacio muy bien ventilado, la cola de contacto emite fuertes vapores por sus disolventes
1. Para empezar, debes decidir qué combinación de colores te gusta. Si conoces a alguien que se dedica a esto, seguro que te regala unos retalitos, de lo contrario el zapatero de tu barrio también te los proporcionaría, agotadas esas posibilidades ya no te queda más opción que buscar un establecimiento de curtidos, donde te los venderán al peso a un precio relativamente económico.
2. Y vale, ya has elegido las pieles, ahora debes cortarlas de forma que todas tengan el mismo ancho, sin que importe su longitud. Eso sí, cuanto más largas o mayor número de piezas, más gordo será el chorizo resultante, esto puede ser ventajoso dependiendo del uso que pretendas dar a tus lonchas, pero más difícil de lonchear conforme más gordo sea. Ah, que tienes máquina de cortar fiambre, entonces me callo.
Como te decía, no importa el tipo de piel pues lo que nos interesa es el colorido y su combinación, sin embargo si alguna de ellas es muy gruesa, como esta que te muestro abajo, déjala entonces para la capa exterior, es decir, que deberá ser la primera que utilices siguiendo este tutorial. Y te preguntarás por qué, la respuesta es porque al ser la primera piel del rulo, la exterior, se “rulará” con mayor facilidad estando hacia fuera, sobre un diámetro mayor, que si estuviera dentro, pues es más dura. Pero bueno, no hay porqué entenderlo bien ahora, tú utilízala en primer lugar y verás en los siguientes pasos a qué me refiero.
3. Ahora sí que vamos ya al lío. Protege la mesa, abre bien las ventanas y el bote de cola, y extiende tus pieles haciéndolas coincidir en su ancho, para que cuadre todo.
4. Entonces coge dos de tus pieles, aplica cola bien extendida con la mitad de una pinza de madera, deja que seque un pelín, y aplica una piel sobre la otra dejando cierto margen.
Te digo lo del margen porque si las colocas al mismo ras luego va a ser más complicado el enrollarlas
Repite el proceso con un tercer retal
¿Y ves?, de nuevo volvemos a dejar un pequeño margen. La distancia no es algo científico, sólo a ojo, y además de necesario para el enrolle, es uno de los factores que intervienen en la combinación de colores final cuando procedamos al fileteo.
Repetimos el proceso otra vez…
… otra más, y cuantas veces queramos, pero ojo, teniendo en cuenta que si luego queda muy gordote sólo nos iba a salvar la máquina de cortar fiambre, así que cuidado
Verás que puedes realizar distintas combinaciones de colores y disponer las pieles uniéndolas del modo que prefieras, esto es un juego: las puedes alinear, puedes pegarlas de forma que todas coincidan en el centro, como tú quieras
Pero algo muy importante, sobre todo para empezar, es que la primera piel sea la más larga, así será más fácil formar el chorizo, te lo muestro aquí con las piezas que veías arriba, ahora giradas
Y continuamos con el juego. Sin abandonar la cola y armándonos de unas pinzas de la ropa, comienza lo importante
5. Extiende cola de manera uniforme en en bordecito de esta tira de retales, ni mucha para que no rebose, ni poca para que no queden áreas sin pegar
6. Cuando poniendo la yema del dedo sobre la cola extendida, se formen unos hilos largos, es decir, cuando está medio seca, enrolla la piel de forma que quede bien apretadita
Vamos a ir pegando poquito a poco, nada de embadurnarlo todo de cola desde un principio, sino con tranquilidad, de lo contrario el pringue, y el colocón por la cola, puede ser de campeonato
Llegará un momento que por el diámetro del rulo unas pinzas te serán útiles
7. Y como te decía, pegando poco a poco: se seca un trozo, entonces encolamos el siguiente, dejamos que seque un poquito, y enrollamos; así todo el rato.
8. Llegará un momento en el que tendrás algo asi, y para afianzarlo le colocarás unas gomas alrededor.
Y ahora sólo nos queda que esperar un buen rato, concédele una hora más o menos, para que la cola seque a la perfección y asi se corte sin ningún problema
Con un cutter muy bien afilado, ya puedes empezar a filetear.
Y hay algo muy importante: un cutter que no corta bien es muy peligroso, máxime cuando como en este caso se debe aplicar fuerza, así que cambia si es necesario la cuchilla para que el resultado sea insuperable y te resulte cómodo de realizar
El primer y último corte pueden resultar inútiles si lo que quieres hacer son botones, pero a partir de la segunda ya es coser y cantar. Eso sí, has de tener cuidadín en cómo cortas, pues si te inclinas un poquito ya no tendrá el mismo grosor por todo el perímetro, sino que será irregular. Aunque claro, estamos jugando a inventar, y tal vez para tu proyecto eso es fantástico, incluso un descubrimiento.
En mi época, además de como botón, les daba infinidad de utilidades en colgantes, pasadores del pelo, horquillas, broches…, tú puedes inventar las tuyas. Ahora se me ha ocurrido una nueva, nada que ver con las anteriores, que te contaré próximamente, ¿vendrás?, ¿te animas con este proyecto?
La entrada Diy: cómo hacer botones de piel con retales aparece primero en Mis Soluciones Pangala.