La primera vez que vi la idea de utilizar perchas para colgar láminas fue en Ikea (como no, lo que no se les ocurra a estos suecos ☺) y pensé: fíjate que idea más simple y genial a la vez. Y claro, decidí hacerla en casa, pero se me ocurrió darle una vuelta de tuerca al asunto y decorar mi percha para que quedase más bonita:
Para hacer nuestra propia percha cuelga láminas necesitamos:
– Cola de carpintero o algún producto similar (Alkyl, Stylpatch…)
Y su elaboración es muy sencilla:
– En primer lugar aplicamos la imprimación para cubrir el color de la madera.
– Tras dejar secar, vamos pegando los washis formando el diseño que más nos guste, fijándolos con cola o similar.
– Opcionalmente podemos aplicar más cola a modo de barniz, dejando secar antes de colocar la lámina (yo no lo hice).
Notas:
– Como ya os dije con esta memoria USB el paso de la imprimación es opcional, pero a mí me gusta aplicarla porque así el dibujo de los washitapes se aprecia mejor (al ser traslúcidos se transparenta el color de la madera y no me gusta tanto el resultado). Evidentemente, si la percha es blanca o de color claro, este paso os lo saltáis.
– Lo de pegar los washis con cola es importante porque si no tienden a despegarse con el tiempo.
– También como paso final podéis aplicar un barniz en spray en lugar de con brocha.
Espero que os haya gustado la idea y que la pongáis en práctica. A mí me parece una forma original de colgar láminas en un despacho, estudio o en una habitación infantil. En mi caso la he utilizado para colgar un calendario en la cocina, donde voy apuntando las cosas del día a día.