Cómo montar una lámpara de diseño sin ningún esfuerzo
Hacer una lámpara es tan sencillo como montar la instalación eléctrica y tan complicado como tú quieras hacer el resto. Yo hoy te traigo la lámpara más sencilla del mundo, pues no lleva trabajo de bricolaje, restauración ni ningún tipo de tarea, vas a ver.
Como verás, el objeto principal de mi lámpara es bastante insólito, así que te propongo otras alternativas, como pueden ser:
-
un pequeño florero, incluso si se rompió y tiene alguna astilla que puedes proteger con otro material
-
una taza, rota o entera
-
un cuenco
-
un conjunto de piedras grandes pegadas entre sí…
Pero antes de empezar te confesaré que con todos los objetos que estoy siempre creando, todavía no me había lanzado con las lámparas. Sí, de adolescente monté alguna por curiosidad, pero no me había puesto yo a ello así en modo creativo. A partir de ahora no voy a parar, tengo millones de ideas, y esta es la primera!.
Si tú también quieres lanzarte a ello, vamos a partir de cero, lo primero:
Montaje eléctrico de una lámpara.
Los materiales son un cable, un casquillo, un interruptor, un cable, y un enchufe.
Yo hice una pequeña trampa porque el cable era reciclado de un aparato estropeado, así que el enchufe ya lo llevaba incorporado, pero te diré que se instala como el resto de partes de este sistema, así que aunque no veas las imágenes, las instrucciones son las mismas que las del interruptor, pero con forma de enchufe
Bien, paso 1. Montar el casquillo.
Conseguir que el casquillo tenga corriente eléctrica es tan sencillo como hacer le pasar los extremos del cable por los agujeritos que ves en la imagen, los que llevan un tornillo cada uno.
Para ello es en necesario aflojar un poquito con un destornillador cada uno de los tornillos
A continuación pelar los dos extremos del cable como ves en esta imagen de abajo
Y seguidamente quitar también el recubrimiento azul el marrón, pero dejando un trocito, sin pelarlo del todo. Con un cutter no cuesta nada, pero debes ir con cuidado de no pasarte y cortar cable también. Lo suyo es utilizar un pela cables, pero yo por no vestirme y bajar al trastero…
Ahora metes cada uno de los cables por cada uno de los agujeros, y vuelves a apretar los tornillos.
El casquillo ya tiene corriente, y lo vamos a probar con una bombilla que no tenga valor, por si acaso…
Ahora lo suyo sería poner el interruptor, pero en mi caso, como la lámpara era un poquito peculiar, no sabía dónde me iba a gustar que cayera, así que preferí dejarlo para el final, e ir montándola.
Me costó menos de un minuto. La gracia de esta lámpara es la bombilla, estilo Edison, y que el propio soporte es bastante peculiar. No sé si sabrás qué es, te lo cuento al final, te va a sorprender seguro. Ya te adelanto que el objeto en sí es algo muy muy malo, no tiene ningún valor sentimental, pero en mi familia se viene guardando durante décadas, ahora está en mis manos y sería incapaz de tirarlo.
Volviendo a la lámpara. Como es una especie de vaso de hierro de varios centímetros de grosor, no pensaba ponerme a taladrarlo, así que el montaje se redujo a unir bombilla y casquillo, y meterlo en el vaso de hierro
Sólo había una pega, y es que quedaba como dejada caer, un poco raruna, y ya te digo, como no podía taladrar el hierro, opté por el remedio que con más frecuencia utilizo:
las piedras
En mi familia se llevan mucho cachondeito por mi afición a las piedras, pero, ¿es solución, o no es solución?
Con un par de ellas al fondo, y otras tantas para mantener el equilibrio, ya lo tenemos resuelto. El cable sale por uno de los lados, y lámpara montada.
Y ahora vamos a por el interruptor.
Para instalar el interruptor de una lámpara, seguimos unos pasos muy similares a los del casquillo, y las instrucciones serán las mismas para el enchufe que va a la red eléctrica.
Desatornillamos el interruptor y vemos que tiene dos parejitas de tornillos color latón (no te fijes en los de los extremos, que esos son los del propio montaje del interruptor, por ellos no pasa corriente alguna).
Además, partimos el cable por donde queremos que vaya ubicado el interruptor
Desmontamos el interruptor como veías antes, y pelamos los cables de igual modo que con el casquillo. Aflojamos los tornillos de uno de los lados, metemos los cables como ves en la fotografía de aquí abajo, y volvemos a apretar los tornillos.
Con el otro extremo del cable que habíamos cortado hacemos exactamente lo mismo en el otro par de tornillos. Verás que no lo hice del todo bien a la primera, observa en la conexión del lado izquierdo cómo queda cobre a la vista, y es no está bien porque te puede dar un calambrazo. Por esa razón lo tuve que desmontar y volver a ajustar, pero no pasa nada, así es una demostración de lo que está bien, y lo que está mal, ¿si?
Y ya tenemos montada la lámpara. Como te decía, mi cable ya llevaba enchufe porque lo recuperé de otro aparato averiado. No obstante el sistema para unir el cable al enchufe es idéntico: pelar un poquito el cable, aflojar tornillos, meter cada extremo del cable, volver a atornillar, y cerrar el enchufe con su tornillito; así de sencillo.
Y ya tenemos la lámpara singular con bombilla estilo Edison tan de moda desde hace un tiempo.
La luz que aporta este tipo de bombillas, al menos la marca que yo compré, es amarilla, muy propia de la época.
Para mi gusto no es el mejor tipo de luz para iluminarse, sin embargo crea un ambiente muy íntimo, como muy de invierno, de cabaña con chimenea
¿no te lo parece?
Y por si no lo has descubierto ya, te diré qué es este misterioso vaso que forma la lámpara.
No es otra cosa que un pedazo de bomba que alguna persona de la familia de mi madre llevó a casa, recogida de la calle en Madrid durante la guerra civil. Evidentemente no estoy haciendo memoria de un periodo tan triste de la historia de nuestras familias, pero sí conservando un objeto histórico y que permanece en mi familia como te decía durante décadas.
Además según he preguntado, estas bombillas continuaban utilizándose en esos años, y también con posterioridad, así que me pareció “bonita”, con muchas comillas, esta combinación. En cualquier caso es un pequeño y discreto homenaje a nuestros padres y abuelos que tuvieron que vivir aquellos duros años de la guerra y los que continuaron en la postguerra.
Y tengo claro que lo normal es no tener una de estas en casa, así que el tutorial tal vez sólo te interesa en su parte eléctrica, pero sin embargo te vuelvo a contar las alternativas que se me ocurren:
- ¿tienes algún florero pequeño que no te gustaría taladrar, y que con unas piedras al fondo quedaría chulo como lámpara, ¡haz la prueba!, de experimentar y jugar surgen grandes creaciones
- ¿un pequeño cuenco, una taza rota, y bonito macetero?
- ¿un conjunto de piedras pegadas entre sí?
Y bueno, ya que nos ponemos con las piedras…, te quería pedir un favorcito,
¿me das tu voto para que entre en el sorteo de un equipazo HP Sprout?, participo con un proyecto que creé (incluye unas piedras jeje) y me encantaría tenerlo en casa, ¿me ayudas?.
Sólo tienes que registrarte en medio minuto en la parte de arriba de esta web, donde pone “login”, y no es necesario que esperes ningún mail de confirmación ni nada de eso, tan sólo en el final, final, final del post que verás que publiqué, ir a la zona donde hay unas estrellitas, marcarlas, pulsar “submit”, ya está, me habrás dado tu preciado voto.
Todo esto sólo si te gusta, claro, de lo contrario…, comprenderé que le des tu voto a otra persona, hay que saber competir sanamente 🙂
La entrada Cómo montar una lámpara de diseño sin ningún esfuerzo aparece primero en Mis Soluciones Pangala.