Cómo limpiar y cuidar una superficie de corte tipo Olfa: el efecto spa
Hoy te traigo un post tan práctico como guarrindongo y al tiempo relajante: cómo limpiar y cuidar tu tabla de corte y trabajo tipo Olfa. Aspectos que debes tener en cuenta si aún la tienes nuevecita y deseas que te dure mucho mucho tiempo en casi perfecto estado.
Sólo con que hayas hecho 5 ó 6 tutoriales pangálicos… ya te doy la bienvenida a mi club de la tabla hecha un asquito, pero si únicamente la utilizas para patchwork es probable que la mantengas casi impoluta,
Y si acabas de empezar con ella…
no creas que esto sólo les ocurre a otros, ¡te puede pasar a tí!
Es guarrindongo en mi caso porque la tengo que da penita: restos de pegamento, cola, hendiduras, fibras de tela intercaladas, agujeros…, pero estas cosas suceden cuando se trabaja, y de no usarlo nada se estropea, es como antaño cuando el salón de casa sólo se disfrutaba con las visitas, navidades y algunos domingos, ¿recuerdas?
Pues bien, vamos a dar a la tabla un tratamiento spa recuperador de lozanía y juventud, pero conservando la experiencia de la edad, vas a ver.
Y ahora vamos al lío, y para sistematizar esto un poquito te voy a mostrar:
- Los problemas tiene/tenía mi tabla, y puede llegar a tener la tuya
- Cómo resolverlos, y sobre todo qué precauciones adoptar para que tu tabla sea como las de pinterest, siempre inmaculadas (tienen una para trabajar y otra para las fotos???)
Esta es una vista de la zona más problemática de mi tabla. En ella se ven:
- restos de pintura textil, que nunca jamás saldrá porque hablamos de una superficie porosa y una pintura permanente
- marcas por ensañarme con el cutter insistentemente en una zona en lugar de variar y cortar también sobre otras líneas. Lógicamente tampoco van a desaparecer
- pegotes de pegamento más o menos gordos, y finas capas que se eliminan con mayor dificultad, pero sí, salen, y eso es bueno
- arañazos por emplear herramientas sobre ella
- manchas indeterminadas, unas se van, otras no
Esta otra es peculiar, la línea vertical que ves con una pelusilla son fibras de una tela que corté incidiendo demasiado con el cutter, y que ha penetrado en la propia tabla. Tampoco tiene solución
Algún que otro agujero por utilizar la tabla para apoyar una aguja gruesa queriendo atravesar un material que se resistía
Esta es otra de las joyitas de la corona, si la vieran los Sres Olfa… Se trata de multitud de hendiduras en forma de líneas verticales y horizontales que han quedado marcadas por emplear un cutter convencional en lugar del circular que recomiendan encarecidamente. Tampoco van a desaparecer
Una astilla en la superficie, sobresale una pizca del material de la tabla por utilizar un cutter convencional en sentido adelante-atrás
Vistos los problemas vamos a por las soluciones.
Para eliminar la cola lo mejor es un disolvente, y el que más a mano tenemos en las casas es el quitaesmaltes. Descarté el aguarrás porque tiene una parte grasa y me dio miedo que manchara la tabla.
En general funciona bastante bien, pero hay que adoptar precauciones para que no te suceda esto:
Esto no es otra cosa que una línea amarilla que se ha empezado a borrar por insistir con el disolvente, así que cuidadín. Esto no ocurre por un simple contacto, sino por frotar sobre ellas, así que utilízalo con relativa tranquilidad
Pues lo dicho, ya está hecha la advertencia antes de que te surja el problema, me ha ocurrido a mi y no tiene por qué sucederte a tí
Para quitar pegotes gordos de este tipo:
Mi solución es poner un poquito de quitaesmaltes con un bastoncillo de las orejas.
Al cabo de unos segundos, operarás con cualquier objeto puntiagudo y no abrasivo, el mío es un punzón antiguo creo de que ámbar.
Empezamos a tratar de despegar la cola en uno de los bordes del pegote…
… y realizando suaves movimientos circulares sobre el pegamento, ya más blando, se irá formando un moquete que eliminaremos fácilmente
Y ¡ojo!, no insistas con tu herramienta sobre las líneas amarillas o te ocurrirá lo que te contaba antes, se difuminarán
Pero imagina que tu pegote está en un sitio tan malo como este:
justo en una intersección de líneas amarillas. En este caso lo mejor desde mi experiencia es tratar de desprender una puntita del pegote con un alfiler o unas pinzas, o bien darle empujoncitos con la punta de este punzón, y a continuación saldrá toda la cola en uno o más trocitos
No obstante insisto, las rayas amarillas NO se difuminan o borran por por el contacto con el disolvente sino por frotar sobre ellas con dicha sustancia
Ahora algo más difícil: eliminar una fina capa de cola bien adherida sobre la porosidad de la tabla, sobre rayitas amarillas, of course, y que de fina que es no podemos desprender con ningún útil. A saber:
En este caso con un bastoncillo pintamos la zona con quitaesmaltes, lo dejamos unos segunditos, y acariciamos, si, acariciamos, no frotamos, su superficie con un bastoncillo
Te sorprenderás porque se formarán unas microbolitas de cola, pero además el algodón del bastoncillo adquirirá un color un tanto sospechoso, muchos diy con materiales diversos que han dejado su rastro
Nota: ¿ves un rodal en la parte superior izquierda de la imagen?. Yo sí, y me preocupó, pero para tu tranquilidad te diré que desapareció pasándole un algodón con el disolvente en cuestión, tontunas que les entran a las tablas…
Solución para las manchas diversas:
La cuestión es probar porque no todas desaparecen, y si no sabes de qué es…En este caso confieso que empecé a limpiarla antes de fotografiarla, era mucho más grande y desconozco su origen. Teniendo en cuenta que no tocaba las famosas líneas amarillas insistí con el disolvente y un bastoncillo, y finalmente la mancha misteriosa desapareció íntegramente
Te diré que no dejé la tabla perfecta, lo más gordo sí que lo quité, pero preferí no insistir en determinadas zonas por aquello de que
lo óptimo es enemigo de lo bueno
y si de tanto limpiar limpio también las líneas de referencia, mal vamos. Además, oye, es síntoma de trabajo y ahínco, y eso no se puede perder
Ya para terminar apliqué generosamente un limpiador de cocina, en concreto uno al aroma de Marsella, y como estoy rodeada de telas quise sentirme en una antigua casona del sur de Francia, pero no lo logré
Con un estropajo gastadito que tengo guardado para menesteres de este tipo froté toda su superficie, y a continuación pasé una bayeta con bastante énfasis, para eliminar restos
Y he de decirte que quedó bastante bien, además de eliminar lo más gordo y muchas de sus manchas, es que quedó limpita y suave, desaparecieron de ella horas y horas de trabajo en durísimas jornadas ;-), fue un efecto spa. De hecho para la próxima creo que le voy a crear el auténtico spa, sumergiéndola en agua con jabón, aunque Valencia es una ciudad muy húmeda este poroso material creo que lo va a agradecer, veremos.
Y es que querida, querido, en la propia tabla ya de dan las indicaciones necesarias, a saber:
- Utilizar únicamente cutters circulares Olfa con sus correspondientes cuchillas Olfa: esto me lo salto a la torera, sin problema, uso la marca que tenga en ese momento
- Cuchillos y cuchillas fijas, tipo cutter no circular, pueden dañar la suerficie: doy fe
- Debe mantenerse extendida, nunca enrollada: yo la tengo siempre sobre la mesa de trabajo
- No someterla a temperaturas extremas, de lo contrario se puede partir o hacer quebradiza
- Evitar la exposición directa al sol, y por ejemplo dentro de un coche cerrado al sol podría deformarse o partirse (la tabla, no el coche cerrado al sol)
- Con el fin de que la tabla dure más, evitar cortar siempre sobre la misma zona para que no se desgaste tanto: a buenas horas mangas verdes
- Aplicar la mínima presión al cortar y fijar la cuchilla de forma que permita la rotación
- Para limpiarla utilizar agua tibia con un detergente suave: y en mi caso estropajo viejecito, bayeta, y resultado impecable, no tengas tanto miedo y remangate a limpiar!
Y este ha sido el tutorial de hoy. Desde luego no es un tutorial para crear objetos cuquis, más bien algo práctico que de vez en cuando no está nada mal. Y para la semana que viene, el lunes, si que os traigo un inventillo bien mono, para el que casualmente no utilicé la tabla, vaya
Pero dime, a ver si me consuelo: ¿tu tabla se encuentra en este lamentabletrabajado estado?, ¿la cuidas como a un hijo, o por el contrario le has perdido todo el respeto?, anda, cuéntamelo a ver si se me va este complejo de artesano de uñas negras que realmente no tengo 😉
La entrada Cómo limpiar y cuidar una superficie de corte tipo Olfa: el efecto spa aparece primero en Mis Soluciones Pangala.