Cómo hacer una cesta de metal
Cambiamos completamente de materiales y técnicas. Os vamos a contar cómo hacer una cesta de metal en casa usando alambre y malla de gallinero. En este blog somos así, un día pintamos con chalk paint y al día siguiente sacamos un pequeño soldador de mano para hacernos nuestra propia cesta de metal. Avisamos que el proyecto es una pequeña prueba a nuestra paciencia, pero a todos nos encanta ponernos retos, experimentar y echar una mirada cariñosa a nuestro proyecto una vez acabado, aunque veamos más de un fallo. Para crear nuestra cesta de metal vamos a utilizar una herramienta de Dremel, que usamos hace unas semanas para realizar un grabado en madera. Se trata de una herramienta muy cómoda y fácil de emplear, que cambia de uso en función de la punta que coloquemos. Ya vamos avisando que tenemos varios proyectos en marcha con esta herramienta porque Papa Noel ha sido tremendamente generoso y nos ha traido más puntas para el grabado en madera. Pero vamos a lo que toca hoy. Si eres una persona inquieta, te gusta descubrir nuevas técnicas y te motiva dedicar algo de tiempo a la semana a hacer exactamente lo que te apetece, este proyecto puede ser perfecto como propósito para 2018. Os dejamos un vídeotutorial de nuestro canal de Youtube para que podáis ver los trucos (esto es importante) y los pasos para hacer una cesta de metal.
Materiales para hacer una cesta de metal
Estamos bastantes emocionados con el descubrimiento de esta nueva técnica. A veces cuando hemos visto muebles con estructura metálicas nos daba un poco de envidia ver cómo trabajaban el metal para crear soportes para mesas o estanterías. Por ahora no nos atrevemos a trabajos de gran escala y tan elaborados… Pero todo llegará. Antes de ponernos con el soplete, hemos querido probar y practicar con una herramienta de pequeñas dimensiones que nos permite de una forma muy cómoda hacer soldaduras con estaño. El mundo de la soldadura es enorme, pero vamos dando mini pasitos para ir conociendo un poco más lo que nos puede ofrecer.
- Herramienta Dremel Versatip. Es una herramienta de mano, que funciona con gas. Para rellenarla podemos emplear el mismo gas que usamos habitualmente para recargar los mecheros. Esta herramienta multiusos, Dremel Versatip, te permite realizar tareas diferentes en función de la punta que coloquemos. Podemos cortar, soldar o realizar pirograbados.
- Alambre. Antes de ponernos a hacer nuestra cesta de metal tuvimos alguna duda sobre los materiales que íbamos a necesitar. Según la idea que teníamos en la cabeza había dos partes diferenciadas en nuestra cesta de metal. Por un lado, teníamos una estructura de alambre que nos servía como esqueleto de la cesta para poder tener puntos de agarre para la malla de gallinero que íbamos a colocar en la base y en los laterales. Por ese motivo teníamos que emplear un alambre de grosor medio. Ni muy fino para que soportara bien la tensión que supone estirar la malla de gallinero, ni muy grueso porque no queríamos morirnos cortando el alambre y dándole forma.
- Malla de gallinero. Lo sé estamos un poco pesados con la malla de gallinero, pero es un material que nos gusta mucho y que creemos puede servir para infinidad de proyectos. Sé que está fatal decir esto, pero aunque nos veáis alguna vez trabajar la malla de gallinero sin guantes…. No lo hagáis. La malla de gallinero es muy fácil de manipular, doblar, cortar…. Pero también pincha bastante y para evitar accidentes no hay nada mejor y más rápido que colocarse unos guantes.
- Taladro de mano. Esta herramienta es esencial si nuestro alambre viene enrollado y con una forma circular. Para conseguir varillas rectas necesitamos el taladro para desenrollar el material rápidamente y sin esfuerzo.
- Alicates. Para dar forma a nuestro alambre vamos a echar mano de unos alicates.
- Cizalla. Cortar el alambre puede ser una tarea un poco compleja en función del grosor del mismo. Con una pequeña cizalla podemos cortarlo sin problemas. Si vemos que se nos resiste porque es muy grueso, podemos emplear la Dremel con los accesorios específicos para hacer cortes de precisión.
- Madera. Un truco que hemos empleado para montar nuestra cesta de metal es utilizar una madera cuadrada que nos sirve como referencia para tomar medidas y para hacer las esquinas. Con la madera como plantilla podemos dar forma al alambre y formar esquinas rectas.
Paso 1: Ponemos recto el alambre
Este paso es fundamental antes de empezar a trabajar. Una vez que hemos decidido el grosor del alambre que vamos a utilizar tenemos que conseguir que quede recto. Hemos comprado una pequeña bobina de alambre, que viene enrollado y tenemos que estirarlo para tener piezas rectas que nos sirvan tanto para hacer los rectángulos como las esquinas. Para desenrollar el alambre y que quede recto vamos a usar un pequeño truco. Cortamos el alambre que está completamente enrollado y fijamos un extremo a algún punto fijo. Nosotros hemos usado la barandilla metálica del taller para “atar” el extremo del alambre. Es importante que quede bien sujeto para que no se mueva cuando estamos estirando. Colocamos ese extremo en la barandilla y el otro extremo lo ponemos en el taladro de mano. Pulsamos el taladro y dejamos que dé vueltas. Veremos qué tenemos que agarrar bien el taladro de mano porque tiende a moverse bastante. En unos segundos el alambre que tenía una forma circular se va desenrollando y se convierte en una varilla recta.
Para crear una cesta de metal muy sencilla vamos a necesitar hacer dos rectángulos, uno de ellos va a ser la base y el otro la parte superior de las cesta. Hay muchas alternativas y podemos ir creando nuestros propios diseños, pero para empezar, lo más sencillo es hacer esos dos rectángulos con el alambre y soldar cuatro varillas en cada una de las esquinas.
Paso 2: Montamos dos rectángulos
Como somos principiantes en esto de trabajar con el alambre y hacer soldaduras hemos querido empezar por un proyecto sencillo y que quede más o menos mono sin tener que morirnos dando forma al metal y luchando contra el alambre torcido. Para facilitarnos la tarea hemos echado mano de una madera que teníamos que se acercaba mucho al tamaño de la cesta que queríamos hacer. Así que ponemos la tabla sobre la mesa de trabajo y con la mano y la ayuda de los alicates vamos a dar forma a nuestros dos rectángulos. Colocamos el alambre en el borde de la madera y presionamos para darle la forma de la esquina. Con los alicates rematamos la tarea para que quede bien recta. Una vez que hemos trabajado el alambre hasta conseguir las cuatro esquinas, vamos a hacer la soldadura para unir los extremos y cerrar el rectángulo. Cargamos con gas la herramienta Versatip, encendemos y acercamos el estaño al punto donde queremos soldar. Con la punta caliente de la herramienta, el estaño se vuelve casi líquido y crea un nexo de unión entre los puntos. Lo que viene siendo, una soldadura.
Paso 3: Colocamos la malla de gallinero en la base
Ya tenemos dos rectángulos hechos con el alambre y cerrados con las soldaduras. Vamos a trabajar sobre uno de ellos, que vamos a emplear como base de la cesta de metal. En ese rectánculo vamos a poner la malla de gallinero. Tomamos medidas y cortamos la malla con la cizalla.
Como la malla de gallinero está hecha de alambre, al cortarla nos quedan en los extremos alambres muy fino que podemos ir doblando y fijando a nuestra base rectangular.
Paso 4: Colocamos las 4 esquinas
Una vez que hemos forrado la base con la malla de gallinero podemos colocar los cuatros alambres que hemos cortado (con la misma medida) para las esquinas. Vamos a ir soldado los alambres primero a la base, cuando tengamos los cuatro bien fijados, podremos soldar los cuatro al rectángulo que hemos hecho para la parte superior. Si vemos que nos resulta complicado sujetar y soldar a la vez, podemos emplear unas pinzas para mantener recto el alambre mientras cogemos el estaño con la mano.
Con movimientos rápidos vamos a ir haciendo todas las soldaduras en las esquinas.
Paso 5: Ponemos la malla de gallinero en los laterales
Cuando terminemos de soldar todas las varillas vamos a poner la malla de gallinero en los cuatro laterales para finalizar nuestra cesta de metal. Cortamos con la cizalla y con los alicates nos ayudamos para agarrar bien los extremos a la estructura metálica.
Con un poco de paciencia y alambre podemos crear todas las cestas de metal que necesitemos para poner orden en nuestros botes de pintura, especias, material de oficina…. Podemos decidir las medidas y personalizarlas de una forma muy sencilla.
Aunque ha sido uno de los proyectos que más tiempo nos ha llevado porque hemos tenido que ir practicando una técnica nueva nos encanta el resultado de nuestra cesta de metal. A ver qué os parecen nuestras primeras soldaduras.
Avisamos que esta técnica engancha y no hemos podido evitar hacer una segunda cesta de metal, pero un poco más grande. Os dejamos una imagen para que podáis ver cómo queda el interior.
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