Un día, mientras tejía
mi capita de punto, se me acercó mi niña y me preguntó para quién era lo que estaba haciendo. Le dije que era para mí y me dijo, poniendo un poco de cara de asco, que no le gustaba. Unos días más tarde estrenaba yo mi capita y al salir para ir a trabajar me vio y esto fue lo que pasó:
– ¡Qué guapa, mami!
– Muchas gracias, cariño. ¿Te gusta?
– Síiiiiii, yo también quiero una
– Pero si el otro día me dijiste que no te gustaba
– Bueno…. es que ese color…. pero yo quiero una, ¿me la haces?
– Claro
Y aquí está, ésta es la capita Blair de mi niña.
Desde el mismo momento en el que le dije que sí se la hacía empezó el acoso. Ese mismo día ya me preguntó si la iba a tener al día siguiente para ir al cole, jajajajaja. Y todos los días me preguntaba por ella, si ya la había empezado, cuánto me faltaba, cuándo la iba a terminar… Ya veis. Yo creo que ya apunta maneras de jefa, todo lo pide para ayer.
La hice siguiendo el mismo patrón que seguí para la mía, con los mismos puntos y todo, pero cambié la lana y el grosor de la aguja para adaptar la capita a las medidas de mi niña. Para ella escogí un color más claro que, se adapta mejor a ella por su edad y, además, permite apreciar mejor el diseño de ochos.
Esta capita está tejida con lana «
Katia Merino Classic» doble y agujas de 5 mm. Se podría tejer también con agujas de 5 y medio y quedaría un poco menos tupida. Yo necesité dos ovillos enteros y un poco del tercero.
La principal diferencia entre ambas capitas es que la suya no lleva el «costurón» que quedó en la mía. Esta vez monté los puntos en una lana de deshecho de otro color y trabajé unas vueltas antes de empezar de verdad la capita. Al terminar hice lo mismo, tejí unas vueltas con una lana de diferente color. Después uní ambos extremos con costura invisible o crafting remallado. Esta técnica ya la utilicé en mi
cuello rosa trenzado.
En la foto podéis ver que aunque quedó bastante bien y no se ve el «costurón» de mi capita, algo sí se nota. Tengo que practicar y perfeccionar la técnica.
Uno de los requisitos impuestos por mi niña fue que quería un lazo para su capita. Claro, faltaría más. Así que nos fuimos con la capita terminada a la mercería de Loli a escoger lazo. Al principio quería unos lazos algo folclóricos, muy coloridos y con lunares, pero finalmente se decidió por dos bonitos lazos de organza, uno rosa y otro azul. Para poder escoger el más adecuado a cada ocasión. Por ahora sólo hemos sacado el rosa.
El día del estreno fue todo un éxito. Fue divina de la muerte con su capita de punto al cole y fue la envidia de sus amiguitas de clase. Cuando la fui a recoger salían dos compañeras de clase con ella y las dos me iban pidiendo que les hiciera una capita como la de mi niña. Ella estaba super orgullosa de tener una prenda tan envidiada y yo también, claro, jeje.
¿Qué os parece? ¿Qué versión os gusta más, la de adulto o la de niña?
Por si os animáis a tejer esta capita aquí van los enlaces de ayuda
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