Antes y después de nuestro salón: Texturas naturales como protagonistas

Hola de nuevo familias,

¿Qué tal? Con la vuelta al cole y a los trabajos, volvemos a las rutinas y empezamos a poner la vista en nuestras casas, ya que a parir de ahora estaremos más tiempo en ella, no? 

En nuestra familia hemos estado poniendo a punto nuestro salón, adaptándolo a nuestros gustos, estilo y manera de vivir, porque las personas evolucionamos y lo que antes nos encantaba, se había convertido con el paso del tiempo en una estancia seria  que no nos representaba en absoluto… ¡Nuestro salón necesitaba un cambio! Y hoy os lo que queremos enseñar 😉

De hecho, os hemos preparado con todo cariño el antes y después de  nuestro salón, en el que hemos elegido elementos que nos hacen sentir bien como texturas naturales; colores neutros, verdes, azules; y piezas prácticas, cómodas y vistosas para disfrutarlas en nuestro día a día.

¿Empezamos por el principio?

Cuando hace ya 16 años compramos esta casa teníamos una idea muy diferente de la decoración que queríamos para ella  a la que tenemos ahora. Elegimos muebles de cerezo de alta calidad, con un acabado clásico que en ese momento era el que más nos gustaba y lo cierto es que son muebles que nos siguen gustando… pero la decoración con la que lo vestimos era igualmente clásica y eso hacía que la decoración fuera muy plana. Correcta pero típica, sin alma…

Por circunstancias personales, tuvimos que mudarnos a Bilbao y esta casa que iba a ser nuestro hogar, se quedó relegada a casa de veraneo, por lo que durante mucho tiempo, no les prestamos demasiada atención, y mucho menos a su decoración.

Según el explorador y la exploradora se han ido haciendo mayores hemos pasamos más temporadas en ella. Está situada en el Valle de Ayala, una zona rural a 30 minutos de Bilbao, rodeada de campo, en contacto con la naturaleza  ¡Y eso nos hace inmensamente felices a los 4! Por eso había llagado el momento de redecorarla.

Nuestros gustos habían cambiado, eso lo sabíamos, pero teníamos claro cuales iban a ser los cimentos sobre los que partir: Color blanco, madera, colores neutros, colores presentes en la naturaleza y texturas naturales como protagonistas. ¡Era imposible no tener en cuenta el entorno natural maravilloso que rodea la casa y no integrarlo en su decoración!

Hace un par de años, cuando montamos esta cocina que como ya sabéis hicimos nosotras mismas (podéis ver la reforma aquí), ya tuvimos en cuenta las mismas ideas; y con el salón o la entrada que os enseñaremos en detalle otro día, hemos sido continuistas en lo que respecta a texturas, colores… Es la única manera de que la decoración de la casa tenga coherencia, como os contamos aquí.

Partiendo de todo ello, empezamos cambiando la pintura. el color topo que teníamos nos gustaba, pero no se pintaba desde hacía 15 años y ya le tocaba… así que elegimos el color blanco de base para ganar en luminosidad. 

Continuamos con pequeños detalles como las nuevas lámparas, la nueva tulipa en cannage,  varios DIY más ambiciosos como un banco de obra bajo la ventana, y otros más sencillos como un espejo industrial… Todo ello con plantas, texturas y estampados naturales o láminas decorativas para lograr una estética mucho más fresca y personal.

Estamos felices con el cambio, y con haber integrado el banco de obra bajo la ventana o la silla colgante de ratán natural. ¡No ha hecho falta nada más! A falta de otros pequeños cambios que seguiremos haciendo poco a poco, los muebles siguen siendo los mismos, y aunque a futuro es más que probable que a la vitrina y/o al mueble de televisión les demos otro acabado o les cambiemos de color, ahora nos sentimos mucho más en sintonía con el ambiente que nos rodea. ¡Y eso en tan importante en un hogar!

Os dejamos con las fotos para que lo veáis en detalle ¡Y esperamos que os guste y os de ideas para vuestras casas!

¿Os ha gustado nuestro salón? ¿Os parece importante personalizar vuestro hogar para adaptarlo a vuestra «manera de vivir»?

¡Sed felices!