Siguiendo con mi colaboración con
Presencia Hilaturas, hoy te traigo un nuevo proyecto del que habrás ido viendo algunas fotos en mis redes sociales.
Se trata de dos tipos de Amigurumis Kokeshi
Siempre me han fascinado estas preciosas muñecas, pero he de admitir que hubo un tiempo que pensaba que «kokeshi» se trataba de su nombre comercial.Hasta que me puse a buscar e investigar acerca del origen de estas muñecas.
He encontrado algunos sitios donde lo explican muy bien, pero te quiero citar un extracto del origen de las Kokeshi según el blog de …
Una Japonesa en Japón, que es el que más me ha gustado.
«Estas muñecas Kokeshi se empezaron a fabricar en la región de Touhoku (norte del archipiélago) a fines del Período Edo, y la muñeca más antigua que se fabricó según los documentos fue durante los años 1804 a 1830 en la prefectura de Miyagi.
Estas muñecas nacieron como regalo para los turistas que visitaban los baños de aguas termales de Touhoku, una región rural con mucha nieve durante los meses de invierno y muy duro para vivir. La venta de estos juguetes contribuyó al desarrollo de la economía de la zona que solo se basaba en la agricultura.»
Me pareció muy interesante y si como a mí te gustan estas muñecas te recomiendo que pases por el blog de Nora porque creo que la información es muy completa.
También me gustaría explicarte que en alguna de las publicaciones la mencioné como Geisha y no como Kokeshi y debo aclarar que no tienen nada que ver, pero es una de tantas ideas erróneas que nos hacemos cuando desconocemos las cosas. Así que te pido que me disculpes por esta equivocación.
La verdad, es que cuando comencé con ellas mi intención era hacer solo dos tamaños diferentes, pero cuando tenía a la primera casi terminada, es cuando me vino a la cabeza que podría utilizar uno de tantos botes de cristal que tengo por casa y que suelo utilizar como maceteros para mis cactus.
Así que al final una de ellas servirá para guardar esos pequeños objetos que se acaban perdiendo por no estar en su sitio.
No estaba muy segura del resultado de esta primera prueba, pero cuando acabé de añadirle todos los detalles ya me tenía enamorada.
Si no supiera que tiene un bote en su interior, creo que no me daría ni cuenta, así que puedo decir que estoy bastante satisfecha.
De este primer modelo me ha sido imposible preparar el patrón, pero a cambio intentaré hacer un pequeño tutorial ahora que por fin han comenzado mis vacaciones! 😉😆
Por otro lado, también tengo que confesar que no estaba muy convencida de usar este hilo para hacer amigurumis ya que la textura final no es la que tienen estos blanditos amigos, pero para estos casos o este tipo de proyectos creo que es muy indicado porque además de aportarles un precioso brillo también quedan más consistentes y se adapta muy bien a la forma del bote de cristal.
La segunda kokeshi si que la tenía más preparada y me fui apuntando el patrón a medida que avanzaba.
Es algo más pequeña sobretodo porque en este caso no esconde nada, pero queda monísima! ¿o no?
Creo que algo muy importante en este tipo de trabajos son los detalles. Por ejemplo, el caso de la faja y el cojín de la espalda fue algo en lo que pensé después de haber cosido las mangas, pero pude recolocarlo y le queda genial.
Por último, la flor de la cabeza me costó un poco más elegirla y al final me acordé de unas rosas que había hecho hace mucho tiempo y aunque eran bastante más grandes la adapté de manera que se pudiera colocar en la cabeza de mi pequeña kokeshi.
Para acabar te traigo el patrón que he sacado a medida que la hacía.
Espero que te guste y que te sirva de ayuda, yo por mi parte solo te pido que si te gusta no te vayas sin compartir este post.
Ahh! Y si te haces la tuya no te olvides mencionarme cuando la compartas en tus redes porque me encantará verla!!
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