Hace unos días un amigo nos comentó que si le podíamos hacer algo para un pequeño rincón de la pared de su casa rural.
Es una zona de la casa con poca iluminación y, por supuesto, tenía que ser una solución económica.
En principio se nos ocurrieron varias cosas, pero nos pareció que un espejo sería una buena solución para dar luminosidad a una zona sombría... además aún nos quedaba algún espejito de los que adquirimos en las rebajas.
En esta ocasión no queríamos que el cuadro destacase demasiado, así que en vez de pintarlo en un color vivo, cortamos unas páginas de un libro (olvidado en el desván y que había llegado a casa como obsequio con la compra de un periódico hacía un montón de tiempo...);
las pegamos con cola (poco diluida) en el marco;
el resto del espejo lo pintamos en blanco mate;
y para darle un toque envejecido acorde con la decoración de la casa rural dónde iba a ser destinado, un ligero toque de betún de judea con mucho cuidado...
Creemos que puede encajar muy bien en una casa de campo, ¿no os parece?
HOLA. GRACIAS POR TAN INTERESANTE IDEA. ES FACIL Y DECORATIVA. LA VOY A VARIAR PONIENDO ALGUNA FRASE PROSITIVA SOBRE EL PAPEL ESCRITO Y ASI SEGUIR INVENTANDO A PARTIR DE LA ORIGINAL.
ResponderEliminarABRAZOS DE LUZ CELESTE
Gracias Luz, una idea genial lo de la frase, ya nos contarás...
EliminarUn abrazo
Me encanta la idea!!!
ResponderEliminarGenial vuestro blog!