Lámpara de tarros de cristal

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Ya estoy aquí para enseñaros un nuevo DIY. Recordaréis que hace un tiempo os dijimos, en un Reciclando que fuerais guardando tarros de cristal que les daríamos utilidad. Pues bien, por fin ese momento ha llegado. Os vamos a mostrar cómo reutilizarlos de la manera más sencilla posible y conseguir una lámpara (nos gustan las luces, puedes ver nuestra otra lámpara customizada aquí) de techo o para una mesita. Vamos a por nuestra lámpara de tarros de cristal.

Qué vamos a necesitar para crear nuestra Lámpara de tarros de cristal:

Los tarros de cristal con su tapa correspondiente.
Tres “casquillos” para las bombillas con rosca “gorda”. Los hay de todos los colores y formas. Yo los he elegido en blanco y con una rosca para sujetar la “pantalla” en este caso será la tapa.
Alicates finos y unos corta-cables
Cable para hacer las conexiones
Una regleta.
Cable con enchufe e interruptor.
Bombillas. Las que sean necesarias, en nuestro caso tres, y de rosca “gorda” como los casquillos.
Pintura en spray si quieres pintar las tapas.

Ahora vamos con los pasos a seguir:

1º. Con la tapa con la rosca hacia arriba -como en la foto- colocamos el casquillo sobre la tapa centrándolo lo máximo posible y dibujamos el contorno con un lápiz.

TIP: No coloques la tapa con la rosca hacia abajo, se doblará-deformará la tapa cuando la intentes agujerear.

2º. Vamos a comenzar por agujerear la tapa desde el centro del círculo dibujado. Ve haciendo los agujeros de forma que los puntos formen un asterisco (foto).

3º. Cuando tengas agujereada la tapa, aumenta el agujero del centro con el destornillador. Así será sencillo agarrar cada una de las esquinas para abrirlas como un plátano. Con el corta-cables recorta los triángulos sobrantes ajustándolo lo máximo a la base. ¡Mucho cuidado con la chapa de la tapa, corta y pincha mucho! Tómate tu tiempo.

TIP2: Como verás en las fotos yo he usado un “mártir”. Mártir=Pieza de madera que colocas debajo para que se pueda agujerear sin preocuparte por tu mesa de trabajo, escritorio o lo que uses para apoyarte, en mi caso, una mesa de ping-pong (inciso de Marina: si no lo dice revienta).

4º. Con la tapa recortada, introduce el casquillo de la bombilla y enróscale la arandela que lleva para sujetarlo al máximo a la tapa. Prueba a colocarle la bombilla y enroscar la tapa a tu tarro, asegurando que la bombilla entra sin problemas con la tapa enroscada.

5º. Quita el casquillo para colocarle el cable. Yo he comprado un par de metros de cable para cortarlo en varios y así conseguir distintas longitudes. Pela los extremos del cable (quitar un poco del plástico protector y dejar visibles los cables de dentro) y colócalo en los “~~bornes~~” del casquillo. Aprieta los tornillos para conseguir la sujeción necesaria y también un buen contacto. Vuelve a montar el casquillo.

6º. Haz lo mismo con el resto.

7º. Como último debes tener en cuenta una cosa: si quieres tu lámpara para una mesita, necesitarás conectarle un interruptor y un enchufe, como hay tantísimos tipos si te surge alguna duda pregunta en tu ferretería, te van a aconsejar mejor que nadie y te pueden resolver muchísimas dudas. ¡Que no te dé vergüenza preguntar, así es como mejor se aprende! Si decides colgarla, ten en cuenta que va a pesar mucho, no puedes simplemente colgarla de la conexión de la regleta, ¡eso es muy peligroso! tendrás que comprar un gancho para lámparas (en cualquier ferretería tienen) y engancharla ahí, la conexión eléctrica no tiene que estar tirante.

Yo me he decidido, como ves, por colocar la lámpara en mi mesita de noche y le he hecho un soporte de madera con unos sobrantes de palé que tenía por ahí, para sujetar los tarros. La idea de atarlos con un cordón de cuero también me ha llamado la atención, seguramente lo pruebe más adelante. Lo mejor de esta lámpara, aparte del reciclaje es que se puede modificar fácilmente sin mucho problema.